En su visita a los estudios de Cadena Radial Nova, el secretario gremial del Sindicato de Trabajadores Municipales de Berisso, Claudio Hiser, habló de su experiencia dentro del gremio y compartió su visión de la actual gestión.
Habiendo trascendido una serie de dificultades, como una desfinanciación, señaló que para todo es fundamental la instancia de diálogo; algo que se "cortó" por momentos con la actual gestión.
Además, remarcó que "quedó demostrado que cuando el trabajador se enoja se manifiesta, a pesar de que siempre fue muy paciente el municipal, porque toleró y salió a trabajar igual".
De allí, la necesidad de reconocer el esfuerzo "porque si se le paga un bono a la gente de salud también se tendría que hacer con otros sectores".
En cuanto a la militancia y acompañamiento a la gestión de Fabián Cagliardi, respondió que por el momento se tomó un descanso, reconociendo que "no es fácil conducir" pero insistiendo en que "debería haber abierto más el diálogo con el trabajador, no sólo con el gremio". Además, "hay muchos miembros del Ejecutivo que coinciden con el diálogo y otros que no, y ahí estamos re equivocados".
Entonces, "si bien las comparaciones son odiosas, con Quique Slezack nos encerrábamos pero salíamos con una idea. Y yo creo que la gente no tiene por qué enterarse de las discusiones", evaluó.
"Voluntad de los muchachos hay", recalcó en base al sector de recolección, "y errores hay pero lo que quieren es cumplir con su trabajo". Cuestión que se traduce en la demanda revirtiendo "el trato y destrato, porque el trabajador cobra pero cubre. Y una de las cosas que no se pueden escapar es el diálogo".
Con respecto a la entrega de la ropa solicitada, consideró que el conflicto radica en el cobro de los proveedores. Por eso, "hay que ordenar y si el intendente da el pie inicial para terceras líneas está bien, ya que Berisso necesita que el intendente gestione afuera con Provincia y Nación".
A la par de ello, aclaró: "Nosotros estamos para conducir porque el trabajador nos eligió para eso, pero nos tenemos que mover según su demanda. En esto no estamos en contra de nadie, pero todo tiene que ver con el entorno".
Asi también aprovechó la oportunidad para manifestar que "hay que tener cuidado cuando uno juzga", poniendo de ejemplo el señalamiento de algunos hacia "los negritos del Corralón", con los cuales tiene una cercanía gracias a su trabajo en este y otros sectores.
Pero volviendo a la gestión, remarcó que "se tiene que recomponer el diálogo con el trabajador donde juega mucho la contención, con gente que tenga buenas intenciones y ganas de conducir".
Sobre el final, manifestó que de cara al 2023 la situación la ve "difícil", porque "se metió mucha gente que dañó al peronismo y eso me da mucha bronca. No lo siente y me pone mal". En pandemia "hablé con Cagliardi y le dije que los militantes estaban enojados".
"No está fácil, se le va a complicar el año que viene", acotó, dejando de lado la mezcla política con lo laboral, lamentando que en los últimos tiempos "se perdió la alegría por ir al trabajo".