En comunicación telefónica con BerissoCiudad, la exdirectora de la Escuela N° 2 y actual asesora pedagógica de “Amor y Ciencia”, María Lilia Merdoff, brindó detalles acerca del club y el trabajo que realizan en pos de cuidar el medio ambiente.
El Club de Ciencias comenzó como un taller de ecología que se llamaba BAN (Bridaga Anti Mugre) que nació de un proyecto institucional que tomaba como eje fundamental la experiencia directa. Y tras la intervención del CONICET paso a formarse este espacio cuyo nombre salió del escudo que caracteriza a la Escuela, “Amor y ciencia al servicio de la comunidad”.
“Al hablar de amor hablamos de vocación y de la propuesta dialógica que debemos tener los docentes”, algo que sin dudas llevó al club a ser reconocido por el número 145.
Bajo este marco se trabajó sobre cuestiones ambientales, talleres de ciencias, sumado a la limpieza internacional de playas en la zona ribereña, dónde participan desde el año 1998.
Esta actividad se va a replicar nuevamente el próximo 22 de octubre en el predio del Club Universitario de Punta Lara, con el aval de Prefectura para darles seguridad a los menores y la colaboración de los tres municipios de la región.
Allí se repartirán elementos de seguridad y se instruirá a los menores en tema de cuidados. Además se hará un conteo de los residuos sólidos que encuentren, entre ellos el plástico que “lamentablemente este integrado en el cotidiano por más de 20 años”.
En este sentido, María Lilia recalcó la importancia de contar este tipo de espacios, porque se trabaja a través de un campo interdisciplinario que genera un feedback en la sociedad, generando futuros profesionales “que son la verdadera cosecha de este granito de arena que se pone”.
Por ello, quienes es estén interesados en concurrir al curso, lo pueden hacer de manera libre y gratuita, los martes de 14 a 16 horas, en el Museo Ornitológico de Casa de Cultura, ubicado en calle Montevideo entre 10 y 11.