Durante el pasado fin de semana, el portal de noticias BerissoCiudad recibió en su redacción una serie de comunicaciones y denuncias por parte de vecinos y vecinas que advertían por el incumplimiento de las medidas preventivas correspondientes a los anuncios de Nación, Provincia y el Municipio que contemplan distintas restricciones para contener la avanzada del coronavirus.

Por un lado, vecinos comentaron a este medio que los eventos que organizaron fueron suspendidos -aceptando la nueva normalidad- sin embargo, al recorrer puntos de la ciudad se encontraron fiestas con mucha más concurrencia que la habilitada.

“No me permitieron hacer el cumpleaños de mi hija con menos de 20 personas”, comenzó exponiendo un frentista, quien detalló que tras pasar por ejemplo por una zona de Los Talas “había más de 30 personas, un cumpleaños, inflable, autos y todo”.

Ante estos hechos, los ciudadanos se comunican -desde el inicio de la pandemia- con el área destinada para la recepción de denuncias ante el incumplimiento de normativa vigente en el marco de la crisis sanitaria que atraviesa el país. A nivel local, es sector que recibe denuncias y controla es justamente Control Urbano.

“Llamo a Control Urbano y no me dan pelota, no me atienden directamente”, manifestaron, dando cuenta de otro caso concreto: “yo suspendí pese al gasto, pero hay lugares donde hay jodas. Llamamos a Control Urbano y no atienden para nada”. 

Asimismo, señalaron los vecinos que ante la imposibilidad de contactarse con la dependencia municipal hacen lo propio con el 911: “llamamos y nos dicen que depende de Control Urbano donde no atienden, es como que se pasan la pelota. La bronca es que a uno no lo dejan hacer pero a los que tienen plata por ahí sí”.

Por otro lado, el transporte público sigue siendo un punto de preocupación en los ciudadanos. Durante las últimas horas recibimos advertencias de usuarios que manifestaron la falta de protocolo y así también la de control.

“Vergüenza en la línea 202, nadie pide controles, viajamos de a mil y un par de inconscientes se dan el lujo de ir tomando mate”, describieron con alarma a este medio algunos pasajeros habituales.

Cabe recodar que el transporte público está destinado a trabajadores conceptualizados como esenciales y en el marco del desarrollo de la educación con modalidad presencial.