El Hospital Larraín no fue ajeno a la tormenta y en distintos puntos de las instalaciones, el agua hizo de las suyas y terminó ingresando en el lugar.
Según dijeron varios presentes, el agua ingresaba por el techo, paredes y en algunos casos, por el mismo piso.
Ante los días de lluvias y que el agua no escurre rápidamente el Hospital Larraín hoy está bajo el agua y han cortado, por las dudas, en diversos puntos de la sala la luz, para prevenir un incidente mayor.