Falta de recurso humano y materiales; incertidumbre sobre el futuro de la fuente laboral de los médicos comunitarios; trabajadores maltratados; personal del SAME sin cobrar sus haberes y hasta una canaleta caída desde enero y aún sin reparar, es parte del lastimoso panorama de la salud pública en nuestra ciudad.
Mientras tanto, la creación de Jorge Nedela -apenas asumió convirtió la Dirección de Salud en Secretaría- hoy se encuentra bajo el mando del doctor Alberto Augstaitis siendo la directora Gabriela Fonseca Noemí Soria jefa de enfermeras y como si fuera poco, se suma al gran equipo Lorena Rusillo.
Cabe destacar también que en el último recorte anunciado por el jefe comunal quedó fuera de área Santiago Ramírez Borga, un profesional altamente calificado y hoy lamentan no contar con su sabiduría. Decenas de empleados aseguran que “era el único coherente y no maltrataba a nadie”.
Fue el secretario quien con una amplia sonrisa se dedicó a presentar a la nueva jefa de Unidades Sanitarias, Lorena Rusillo. Afirman que su trabajo será ad honorem, aunque muchos dudan de esto.
Rusillo participó en el Frente Renovador ocupando el tercer lugar, luego al no lograr su banca se separó del espacio siendo funcional al oficialismo que en enero de este año y ante la imperiosa necesidad de aprobar el pacto fiscal impuesto por el Gobierno provincial, aprovechó la licencia del edil Maximiliano Barragán y asumió sólo para aprobar ese expediente.
Hoy vuelve al oficialismo para incorporarse a un área que hace agua por donde se mire, aún se desconoce su función precisa ya que desde Intendencia no han brindado ninguna información oficial al respecto.