Panorama político

Pandemia: Los oportunistas de siempre, los cuestionados, abren comercios y "a dar el ejemplo"

Sigue la cuarentena en Berisso.
Sigue la cuarentena en Berisso.

La pandemia azota al mundo, al país, a la región y a cada uno. No podemos abrir este editorial con otra palabra. El miedo se apoderó de los argentinos, de las calles, de la confianza colectiva, se apoderó de la economía y nos puso patas para arriba. Un poco más, un poco menos, todos somos protagonistas y responsables de que esto funcione y que salgamos airosos.

El presidente Alberto Fernández, en consonancia con este planteo, en la noche del viernes anunció la fase cuatro de la cuarentena pero no para el AMBA, donde los berissenses quedamos incorporados.

Según autoridades del Ejecutivo municipal, encabezadas por el intendente Fabián Cagliardi, sobre lo que pase en la ciudad aún no hay definiciones y están “esperando al gobernador Axel Kicillof” y el diagrama pormenorizado de lo que él defina.

El comercio, en nuestra zona es el sector que más presión ejerce por ser uno de las fuentes laborales más contenedoras y de los más perjudicados por donde se mire (inclusive muchos teniendo no volver a abrir), así también la liberación del trabajo popular e informal, que aportan a la rueda de la económica local.

De todos modos, se espera este lunes tener novedades importantes al respecto, con una apertura planificada aunque con un estricto protocolo de funcionamiento, con horarios restringidos, distancia social y uso obligatorio de tapaboca, entre otros puntos

Lo innegable es que con vida, todo se puede pelear. Y en sintonía con el Gobierno nacional y provincial, el local apunta a seguir sosteniendo los resultados positivos en el distrito.

Hoy Berisso cuenta con cero casos positivos de coronavirus activos, ya que los tres que fueron diagnosticados recibieron el alta médica.

Esto no hace más que reforzar que el que transitamos es el camino correcto.

No todo es pandemia: Aún hay tiempo para designaciones

“No todo es coronavirus”, expresan a gritos aquellos que tienen otros intereses. Desde pacientes con patológicas crónicas a tratar pidiendo la atención de profesionales, como las industrias para lo cual se planifica la liberación gradual pasando  por ejemplo por áreas de la comuna que recibieron funcionarios.

En este contexto, Obras Públicas incorporó a Gonzalo  Hayón sin bombos ni platillos, pero con expectativas.

Cumplieron con el acuerdo con el funcionario de Cambiemos José Correa, le hicieron el favor, se jubiló y se encendió la luz verde para el extrabajador de ANSeS.

Obras Públicas se presenta como un área sensible y siempre en el ojo de la tormenta, hoy con un escenario demandante y en emergencia multidisciplinar.

Otro de los espacios que, pese a la cuarentena supongo gozar de la danza de nombres y el engrosamiento del planteó fue Seguridad.

Dicen que la subsecretaria Mónica Bassi, quien cobra una suculenta dieta y a la que no se le conoce la voz, está en cuarentena por cuestiones de salud. Como debe ser.

Lo cierto es que pre pandemia la funcionaria ya brillaba por su ausencia, al menos en forma cotidiana y mediática.

Hoy -pese a necesitar a cada uno de los soldados en pie- Bassi sigue en su puesto y dicen “buscar fortalecer falencias”, sumando en este caso coordinadores.

Un viejo conocido -de desgastada figura por sus permanentes saltos de bando en busca de acomodar bien su ficha- fue nombrado coordinador de Foros.

Se trata de Oscar Sosa, exfuncionario de Enrique Slezack, aliado durante la campaña 2019 del espacio de Juan Ignacio Mincarelli contra Cagliardi.

Sosa, a quien aún no concluido el año pasado se escuchó defenestrar al mismo Mincarelli, dando un magistral ejemplo de panquequismo oportunista). Hoy se incorporó a la estructura municipal.

Con esta designación y otras como la de Rubén Vicente, Moly Mareco o Pedro Vacherand (también sería como coordinador en el área Seguridad), que apoyaron a Mincarelli en las PASO (sin ser del riñón del referente peronista), en realidad se buscaría desde la actual gestión ir por la ruptura del espacio que se construyó previo a las elecciones.

Y del lado de “los oportunistas de siempre”, los mismos que apoyaron a Mincarelli y fueron contra Cagliardi, solo se ve la beta del buen sueldo.

Pero como no se puede con todo, se hace un párrafo aparte para aquella gente -propia del constructor y actual intendente- que continúa a la espera.

En el nombre de la famosa “apertura” también esperan los distintos sectores que en su momento recibieron la promesa de ser incorporados a la repartija. 

Lo espacios de Ramón Garaza o Ángel Celi, por ejemplo, no contaron con representación dentro del Ejecutivo.

Sí llama la atención que por lo bajo hay gente que trabajó desde el comienzo con el jefe comunal sin recibir nada hasta el momento.

Algunos hasta se animan a decir que “hay gente vende humo” como sería el referente de Octubre, a quien le dieron una coordinación.

Hoy sólo por estar en su casa cobra más de 100 mil pesos. “Sin un trabajo territorial que justifique ese nombramiento”, mencionan desde el riñón del cagliardismo.

Los cuestionados

Reconociendo el complejo e inesperado escenario que hoy se presenta a nivel mundial, se potencian las pruebas.

Los gobernantes de todos los estratos deben estar a la altura y responder. Es el desafío que les tocó, con demandas por doquier y el famoso “respuestas extraordinarias para situaciones extraordinarias”.

En este marco, con pocos meses de gestión a nivel local, ya hay “cuestionados”.

Y habiendo desarrollado parte de lo que acontece en la subsecretaría de Seguridad, hay que agregar áreas como la de Salud.

Salud se presenta como un sector neurálgico y ante una emergencia sanitaria general a Rita Hernández y su profesionalismo vinculado a lo social (es trabajadora social) y no la medicina. Muchos manifiestan que si bien la propuesta era interesante en tiempos de pandemia la especialidad de la autoridad del área debería ser otra.

Del mismo modo, el tema que hoy circula en el mundillo político es el rol de la presidenta del Concejo Deliberante, Vanesa Queyffer.

La edil logró colocar a sus “amigos” en medio Gabinete. Hoy la oposición la acusa de querer dividir inclusive desoyendo los lineamientos del propio Cagliardi de “trabajar en conjunto”. Y hay quienes, desde el propio espacio la miran con desconfianza asegurando que (sin respetar plazos y pandemias) que ya camina de cara al 2023.

Dicen lo que hay que hacer pero no hacen lo que dicen

Durante los últimos días los berissenses se mostraron preocupados por el incumplimiento de la cuarentena o por lo menos del aislamiento por parte de figuras de la política local y, peor aún, con responsabilidades institucionales.

El Ejecutivo y el Legislativo, más allá de realizar sus actividades cumpliendo con lo que el pueblo les confió aparentemente hacen uso de sus “libertades” y se juntarían a comer, visitarían amistades y todo “en nombre de la cuarentena”.

La comunidad también exige, y hay que profesar con el ejemplo.

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