El SUTEBA seccional Ensenada motorizó una colecta solidaria con el barrio José Luis Cabezas, uno de los más golpeados por el coronavirus.
Al respecto, el referente docente y dirigente del Nuevo MAS Ensenada, Facundo Gaspari, expresó que “luego de la primera semana de poner en pie una colecta solidaria en el sindicato, el jueves se hizo entrega de las donaciones al barrio”.
Hoy nos acercamos al J.L. Cabezas a llevar donaciones que docentes y vecinos acercaron al SUTEBA Ensenada. Debemos profundizar este camino: un sindicato abierto, que organice la solidaridad desde abajo y la lucha por obras públicas, inversión en salud, salario universal. pic.twitter.com/uq0aj3DJID
— Facundo Gaspari (@Facundo_gaspari) June 25, 2020
“Con la Agrupación Carlos Fuentealba fuimos parte de la delegación que acercó alimentos, artículos de limpieza, ropa de abrigo, libros de cuento y juegos de mesa que fueron donados por docentes, vecinos y negocios de la ciudad en pocos días, mostrando una enorme solidaridad por abajo entre vecinos y trabajadores”, detalló el dirigente.
Asimismo, explicó que “en el barrio fuimos recibidos por familias, muchas madres y padres de estudiantes de la escuela pública, quienes manifestaban que la pandemia y la falta de asistencia alimentaria siguen generando hambre, la falta de obras continúa haciendo muy difícil mantener mínimos cuidados de higiene y limpieza, y la creciente desocupación o subocupación no permiten realizar la cuarentena necesaria para no exponerse todos los días al contagio (dentro y fuera del barrio)”.
“La pandemia agravó condiciones que ya mantenían a los vecinos del barrio en una situación muy difícil, y si bien se levantó el aislamiento de un sector del barrio, la realidad es que las necesidades siguen allí y en muchos casos son más acuciantes que ayer. Pero desde el gobierno provincial y municipal, la forma de abordar el crecimiento de contagios fue desde el ángulo represivo del ministro de Seguridad Sergio Berni, quien a cargo en un primer momento, aisló un sector del barrio con decenas de policías”, lamentó el referente sindical y político.
“Pero, por el contrario -prosiguió-, las vecinas y vecinos del barrio siguen exigiendo trabajo, obras públicas, agua potable en todas las casas, y medidas concretas para poder cumplir con el aislamiento social, como contar con un salario universal para las familias que lo necesiten”.
“Así lo manifestaba una vecina que, una vez que le acercamos las donaciones, se iba rápidamente a trabajar en una changa fuera del barrio para poder llevar comida ese día a su casa. Sin estas medidas, que pueden y tienen que pagarlas los grandes empresarios con un impuesto a sus millonarias ganancias, los vecinos no tendrían que seguir eligiendo entre arriesgarse al contagio o comer. Sin que el gobierno deje de tirar miles de millones a los especuladores internacionales con el pago de la deuda, sobrarían recursos para estas medidas cada vez más necesarias conforme crecen y crecen los contagios”, añadió.
Finalmente, recalcó que “desde la Agrupación Carlos Fuentealba estamos convencidos de que este es el camino que debemos profundizar como sindicato: ponernos al servicio de seguir organizando la solidaridad desde abajo, con los barrios y familias de nuestros alumnos, pero también acercar esta campaña a otros sectores, como los trabajadores y trabajadoras de la salud”.
“La pandemia empieza a poner en crisis los centros de salud, se multiplican los contagios en las fábricas y lugares de trabajo, y siguen surgiendo nuevos ‘barrios Cabezas’ en toda la región con la disparada de contagios. Manteniendo los cuidados que venimos implementando, tenemos un rol fundamental como sindicato combativo ante la inacción de los sindicatos dirigidos por la burocracia de la CGT y las CTAs, y un gobierno que no deja de ceder y ceder a los empresarios anti-cuarentena. Por eso queremos que esta campaña solidaria sea sólo un punto de partida y que la solidaridad entre los de abajo vaya creciendo durante los próximos días y semanas”, sentenció.