En diálogo exclusivo con FM Berisso Ciudad 88.5, el Sabonim Aníbal Fernández repasó los logros y desafíos de su extensa trayectoria en el mundo del taekwondo, marcando hitos como la expansión de su escuela, el impacto de esta disciplina en las comunidades locales, y los planes futuros que buscan consolidar al taekwondo como una herramienta de inclusión y crecimiento personal.
Un 2024 de crecimiento exponencial
Fernández destacó el notable crecimiento de la escuela que lidera, la cual ya supera los 500 alumnos distribuidos en Berisso, Ensenada, La Plata y otras provincias como La Rioja y Catamarca. “Hemos trabajado mucho para que el 2024 sea un año tan importante, no solo en lo deportivo, sino también en el crecimiento integral de nuestros alumnos y de la disciplina”, comentó. Además, resaltó la apertura de nuevos centros de enseñanza, como el próximo dojo en el Club Alianza, a cargo de una joven alumna que comenzó a practicar taekwondo a los seis años.
Taekwondo adaptado: un compromiso con la inclusión
Uno de los proyectos más destacados es el trabajo con personas con discapacidad. Según Fernández, esta rama del taekwondo ofrece una respuesta única a las necesidades de cada practicante. “Es gratificante ver cómo estos chicos superan barreras día a día. Les brindamos las mismas oportunidades que a cualquier alumno: competir, rendir exámenes y crecer en confianza”, expresó. Este programa, desarrollado en conjunto con la Dirección de Deportes y llevado adelante en el Club Villa Zula, ya cuenta con un equipo sólido y planea retomar las clases en marzo.
Preparativos para el Mundial de España 2025
La temporada 2025 comenzó con gran entusiasmo, con una pretemporada que superó las expectativas al reunir a más de 40 practicantes. "Estamos trabajando para el segundo campeonato selectivo al Mundial de España, con un enfoque integral que incluye nutricionistas y psicólogos deportivos, herramientas innovadoras que pocos están utilizando", explicó. También señaló el impacto del trabajo realizado en provincias como La Rioja y Catamarca, donde se están gestionando la creación de escuelas municipales y provinciales de taekwondo.
35 años de trayectoria y un legado en construcción
Con 35 años dedicados al taekwondo, Aníbal Fernández reflexiona sobre cómo esta disciplina ha transformado su vida y la de sus alumnos. “El taekwondo me formó como persona y me enseñó valores que hoy intento transmitir. Es un generador de oportunidades, porque permite lograr cosas impensadas. A través del taekwondo, no solo formamos deportistas, sino personas con herramientas para enfrentar la vida”, concluyó.
El legado de Aníbal Fernández no solo se mide en la cantidad de alumnos o competencias ganadas, sino en el impacto social de su trabajo, que sigue rompiendo barreras y abriendo puertas para muchos.