Un hombre llamado Walter se sorprendió días atrás cuando en su lugar de trabajo recibió una carga de tierra que parecía tener el aspecto de un pedido más, pero se llevó una grata sorpresa.

En la zona de 32 y 176, en Berisso se hizo el vuelco y al caer la tierra notó que había lo que a un primer ojeo parecían ser piedras. Con una observación más detallada pudo saber que en verdad no se trataba de toscas sino que parecían ser restos óseos. Al lavarlos Walter vio que las muestras eran numerosas y que no se correspondían con huesos humanos: “Parecían de un animal grande”, contó.

Ante esta situación que se dio hace unos 10 días decidió dar aviso al Museo de Ciencias Naturales, allí expertos le terminaron confirmando que se trataba de los huesos de un mastodonte. La mayoría de las muestras quedarán en la institución dependiente de la UNLP para su completa reconstrucción.

En diálogo con este medio Walter agregó: “No buscaba plata por entregar estos huesos, fue más por una cuestión de curiosidad que me acerqué”, relató. En cuanto a la cantera en donde se cargó el camión se sabe que es de La Plata pero no se reveló el lugar, se cree que puede haber huesos de otros animales esparcidos en variados puntos de la región y no se descartan nuevos hallazgos.