En febrero, el intendente se había acercado al barrio Villa Roca y anunció que se extendería la red de agua en la zona de 26 y 150, un área donde muchos vecinos han realizado conexiones particulares, pero no hay presión.
Ante la falta de respuesta de la municipalidad, un grupo de 20 vecinos decidió ir a Montevideo y 66 para cortar la arteria. Encendieron fuego y bloquearon el paso con pancartas que señalaban su reclamo. La policía local intervino y maltrató a los manifestantes: recibieron empujones y tres mujeres fueron embestidas por un auto, aunque no sufrieron consecuencias que requirieran hospitalización.
Cerca de las 8 hs, el intendente se acercó para descomprimir la situación y mencionó: “Lunes, martes o miércoles arranco con la obra, y si no comienzo, vengan a cortar nuevamente”. Ante esta promesa, los vecinos decidieron levantar el corte.