En diálogo con BerissoCiudad en Radio, el médico Ángel Rivero se refirió a la situación actual desde lo sanitario, lo social y lo humano.
La complejidad, la extensión en el tiempo y la incertidumbre fueron algunos conceptos que se plasmaron en la charla.
“Cuando comenzó, uno veía por televisión lo que pasaban en China, en Europa. Cuando apareció acá, se tomaron las medidas en el momento justo”, comenzó planteando y añadiendo que por la cuestión económica es necesario una flexibilización, pero no así una relajación social.
La cuarentena rindió frutos y se generó el robustecimiento del sistema de salud: “uno de los objetivos fue fortalecer el sistema, el número de camas, el sistema de testeos, todo se logró por las medidas precoces”, enumeró el profesional.
Actualmente, los casos de coronavirus se incrementaron pero “es una meseta, no hubo un ascenso demasiado brusco más allá de qué hay una cantidad elevada. El tema de la gravedad y la mortalidad también es un parámetro, tenemos una mortalidad más baja que en el mundo y eso es parámetro de que las medidas dieron resultado”.
Sin dejar de lado la economía, el médico indicó que “hay que buscar el sostenimiento de las familias lo que no implica que esto haya terminado. Las medidas preventivas hoy son la vacuna que tenemos”.
El impacto no es el mismo en las distintas realidades sociales, culturales y económicas. El doctor Ángel Rivero lo sabe y aborda la problemática desde lo humano, inclusive forma parte del equipo que trabaja en la calle Nueva York para la asistencia en las ollas populares.
“No hay una concientización y es alarmante. Sabemos que las zonas más afectadas son el AMBA y la Ciudad de Buenos Aires. Hay que tomar todas las medidas, pero no sé si la Policía es la solución. Yo estoy trabajando con los chicos en la Nueva York y desde el comienzo desorganizado, luego dándole las directivas y explicando. Hoy de las cien personas no hay una que no cumpla con el tapaboca”, reconoció.
Y subrayó: “los referentes de los barrios también trabajan para generar conciencia. El papel protagónico que tomaron los referentes para sostener los barrios es relevante”.
La afección emocional también es prioridad, pues “son situaciones que en la medicina se plantean a diario”, graficó.
“El miedo paraliza, hay que ser cautos y concientizarse en que esto no terminó. Nos tenemos que seguir cuidando, hay que seguir con la guardia en alto, con las medidas, con la familia y en el barrio”, precisó, para finalmente hacer foco en que “el lema es humanizar la salud”.