Ante la irresponsable convocatoria de algunas personas que a realizar una fiesta clandestina en la plaza del Barrio Náutico, motorizada por personas que no son de la zona, los vecinos no se quedaron de brazos cruzados.
Es que a pocos metros vive un nene con autismo, por lo que los frentistas se organizaron para juntar firmas y hacerle entender a los organizadores que no cometan ese “atropello”.
Del mismo modo, le piden al municipio que no permita la realización del evento, priorizando la petición de los vecinos y la salud del niño anteriormente mencionado.