Este lunes por la tarde, vecinos de calle 124 entre 77 y 78 se hicieron eco de un reclamo que data de meses, donde la falta de agua vuelve a ser el punto central de su malestar cotidiano.
“Hace tiempo que no tenemos nada de agua, y ya no sabemos qué hacer. No nos podemos bañar, lavar los platos, la ropa que usamos es una vergüenza”, describen a través de los mensajes destinados a este medio.
En medio de todo eso, ABSA “hace oídos sordos al igual que la Delegación Zona I”, cuestionaron.
Esta situación los llevó a averiguar qué era lo que estaba pasando, y que en definitiva “lo único que se requiere es la presencia de la empresa para conectar nuestro ramal a otro que tiene buena presión, y listo”.
Una labor que, según los vecinos, llevaría sólo un par de horas para mejorar la calidad de vida de decenas de familias que “ya no dan más”.