La Secretaría de Producción, a través de la Coordinación de la Isla Paulino, comunicó que entre las acciones desarrolladas se llevaron adelante gestiones para atender un antiguo tema vinculado con la erosión de la costa isleña, provocada puntualmente por el oleaje que genera la circulación de buques, prácticos y remolcadores en el canal de acceso al Puerto La Plata.
Ante esta situación, se establecieron medidas para atender este tema, que significa desde hace años una preocupación para los habitantes del lugar.
En este sentido, luego de gestiones realizadas por parte del Municipio local y los isleños ante Prefectura Naval La Plata, el pasado 17 de abril se aprobó una disposición que establece que las embarcaciones que transiten por el canal de acceso al Puerto La Plata, adyacentes a la Isla Paulino, pueden desarrollar una velocidad máxima de seis nudos, que generalmente se conoce como Velocidad de Puerto, lo que evita que se generen olas o grandes marejadas.
Al respecto de esta nueva implementación, el coordinador de la Isla Paulino, Germán Salmen, aseguró que “la Isla es afectada continuamente por la erosión costera y por la navegación de buques de gran calado”. “Esto es un reclamo desde siempre de los isleños por el tema de la velocidad con la que se navega y genera esta problemática”.
“El día 13 de abril nos reunimos con el prefecto general de Prefectura La Plata para trasmitirle la preocupación de los isleños en cuanto a la velocidad que desarrollaban los buques comerciales, remolcadores, entre otros que transitan sobre el canal de acceso al lugar”, añadió, para luego señalar que “ellos también presentaron una nota ante Prefectura para reforzar el pedido”.
La disposición rige hace varios días y comprende el tramo que va desde la entrada del Puerto de Cuatro Bocas hasta el kilómetro 7,700 aproximadamente.
“No es una solución total, pero es un paso ya que esto evita que se erosione la costa constantemente. Hay lugares en la isla que presentan desmoronamientos de unos 60 centímetros por año y otros lugares de acuerdo a la geografía hasta de un metro, con el peligro de derrumbe de casas históricas. También es una forma de aportar mayor seguridad, ya que las embarcaciones propias de los isleños pueden sufrir daños”, finalizó el coordinador de Isla Paulino.