Además de la emergencia sanitaria, en algunos barrios de Berisso, y especialmente en La Franja, se acentúa la emergencia alimentaria mientras escasea la colaboración por parte del Municipio.

Así lo perciben quienes viven en aquel cordón alejado del centro berissense, con familias enteras que se ven afectadas por las medidas de cuarentena.

Ricardo tiene su domicilio en La Franja, al que el llama “el último barrio de Berisso”. Es albañil y oficial pintor, pero debido al aislamiento no puede tomar trabajos porque “desde hace diez días la gente no quiere saber nada, y es lógico”, recalcó.

A pesar de estar de acuerdo con esto, señaló que “hasta ahora no recibieron ningún tipo de ayuda, y encima que no se trabaja ya la gente no sabe a dónde mirar".

Sujeto a experiencias previas, expresó: “siempre, mi barrio es el último para todo. Con la inundación del 2 de abril pasó lo mismo".

Por eso, consideró oportuno que “de una vez por todas, y tomando el ejemplo de Mario Secco en Ensenada, nuestras autoridades se acuerden de nosotros, porque también somos de Berisso. No queremos que nos regalen nada, sólo pedimos que nos ayuden a atravesar esta situación".