Vecinos de calle 67 y 126 pidieron el apoyo de las autoridades para realizar, controles, testeos y la desinfección de una vivienda que funcionaba como kiosco y cuyos propietarios dieron positivo de COVID-19.

“La semana pasada internaron a una señora y el sábado le dieron los resultados de COVID-19 positivo. Supuestamente iban a venir a desinfectar la casa de esta mujer pero hasta el momento no vino nadie”, señalaron los frentistas.

Descartando cualquier tipo de escrache hacía la familia, señalaron que su preocupación está en que esté lugar era el kiosco del barrio al que asisten la mayoría de las personas de la cuadra para hacer compras diarias.

Ante las últimas novedades, “nos acercamos a la Delegación de Villa Argüello, hablamos con Maximiliano Ali, luego con la presidente del Concejo, Vanesa Queyffer, y por último nos pasaron el teléfono de la directora de Infectología y todos nos dijeron que no sabían que esta pareja tenía coronavirus”, detallaron.

En medio de ello, advirtieron que “hay muchos vecinos que comenzaron a tener síntomas de resfrío y están muy asustados, sobre todo porque en esta zona hay varios niños con discapacidad”.

Por estos motivos, pidieron encarecidamente que se hagan los controles necesarios, “más allá de que todos estemos cumpliendo con las normas de aislamiento”.

“Necesitamos que vengan a desinfectar, y de ser posible que hagan testeos a aquellos que están enfermos”, concluyeron.