A una semana de cumplirse un año de la puesta en funcionamiento de la UFI Nº 13, especializada en violencia de género, en La Plata, la titular de la fiscalía, Mariana Rufino, explicó que por día reciben cerca de 20 denuncias de mujeres maltratadas, y admitió que hay damnificadas que repitieron hasta siete veces sus denuncias.

Respecto de cuáles son los delitos más comunes en la violencia de género, la funcionaria explicó que se trata de “lesiones, amenazas, hostigaciones y desobediencias a las órdenes de restricción o de acercamiento”.

“Todos esos delitos, de acuerdo al artículo 151 del Código Penal, no son detenibles, pero cuando tenés una acumulación de delitos te permite pedirle al juez una medida más gravosa, como es una detención, porque podés fundamentar que aquí hay un peligro de reiteración delictiva, que esa mujer corre riesgo de vida. Entonces, ¿qué vamos a esperar?: ¿Tener una causa de homicidio y resolverla con la persona detenida cuando podemos evitarlo? Y poder solucionarle momentáneamente a la víctima el problema: cesar con la agresión de la persona que la está molestando y, a su vez, también ayudar a que esa persona reflexione y no lo vuelva a hacer”, explicó.

En cuanto la contención de la víctima, señaló que “a veces, el Estado no le da los mecanismos ni las herramientas para que pueda salir adelante. Nosotros somos un grupo de operadores que intentamos ayudarla a ella, pero, en el medio, hay muchas fallas. La máxima medida que puede tomar la Justicia Civil es la cautelar de prohibición de acercamiento; pero no siempre los agresores la obedecen y entonces entra el fuero penal”.

“Estoy acá defendiendo los derechos de las víctimas. Cuando la víctima abandona su lucha, la tomo yo. Cualquier persona que, en algún momento se acercó hasta nosotros y nos reclamó la intervención de la Justicia tenemos la obligación de llevarla para adelante”, cerró Rufino.