Con motivo de saber cómo repercute la inflación en el precio de los distintos cortes de carne, este jueves por la mañana BerissoCiudad visitó las carnicerías locales y dialogó con los empleados quienes confirmaron la suba.
El último anuncio del Gobierno fue el incremento en el cerdo, algo que finalmente se vió reflejado en Berisso y al día de la fecha se equipara con el valor del pollo.
Dos opciones que pasaron a ser una alternativa en la mesa de los vecinos los cuales, según informaron los comerciantes, consultan a diario la forma en la que pueden ir alternando el menú. Sobre todo a fin de mes.
Así también comentaron que los valores cambian constantemente, respondiendo a los distribuidores. Algo que sin dudas no depende de su voluntad sino de la ganancia o diferencia que pueden sacar para mantenerse.
Por otro lado, más allá de las milanesas que rondan los novecientos y mil pesos, señalaron que los asiduos a la carne de vaca prefieren escatimar en otro tipo de productos pero no así con lo que están acostumbrados a consumir, "quienes comen asado y bife no cambian".
De esta manera, con valores que van de 1200 a 1500 según el corte, o 400 y 600 para hígado, caracú y mondongo, "la gente se las va rebuscando como puede, pero comprando al fin".