La Fiesta Provincial del Inmigrante sigue siendo el corazón de Berisso, y la Carpa del Inmigrante es uno de los espacios más concurridos por vecinos y visitantes. Allí, la diversidad cultural se vive a pleno a través de la gastronomía y las tradiciones de cada colectividad que participa en el evento.
“El ambiente es espectacular, se siente la energía de cada país representado. Es como viajar sin salir de la ciudad”, comenta Marta, vecina de Berisso que asiste cada año con su familia. A su lado, Juan, otro vecino que disfruta de la fiesta, agrega: “La comida es una de las principales atracciones, pero también la música y los bailes. Es una manera de acercarse a las raíces de nuestros abuelos y enseñarles a los más jóvenes sobre nuestras tradiciones”.
La Carpa del Inmigrante no solo ofrece un recorrido por los sabores del mundo, sino que también es un espacio de encuentro y convivencia entre generaciones. “Vengo con mis hijos todos los años, y es emocionante ver cómo la comunidad se une para hacer algo tan lindo”, dice Sofía, quien asegura que su familia tiene raíces italianas. Por su parte, Ricardo, quien visitó la carpa por primera vez, comenta: “Es una experiencia increíble. No sabía que Berisso tenía una historia tan rica en inmigración. Ahora que lo conozco, volveré todos los años”.
A lo largo de la jornada, se pudieron disfrutar distintos espectáculos de música y danza, todos representativos de las colectividades participantes. Según Mónica, quien participa como voluntaria en una de las colectividades, “es un orgullo mostrar nuestras tradiciones a la comunidad. La fiesta no sería posible sin el trabajo conjunto de todos los que ponemos nuestro granito de arena”.
El evento continuará durante los próximos fines de semana, permitiendo que más personas puedan disfrutar de esta celebración de la diversidad y el legado inmigrante que caracteriza a Berisso.
