Un chofer de la línea 202 solicitó la colaboración de personal policial por la presencia de una pasajera que iba ocasionando disturbios en el colectivo.
Los uniformados se llegaron hasta 60 y 128, subieron al coche, pero no lograron calmar a la exaltada mujer, de 31 años, apellidada Siman.
De hecho, amenazaba e incitaba a la violencia, emanando fuerte olor etílico.
Así las cosas, se procedió a demorar a la mujer y se labró una contravención.