El secretario de Seguridad de la comuna, Federico Ruiz, abordó la polémica generada por el uso de la pista de atletismo "Olmi Filgueira" para la realización de un evento rockero. En diálogo con FM Berisso Ciudad, también aludió al conflicto entre el municipio y los guardavidas.
La polémica comenzó cuando un grupo de docentes y deportistas expresaron su preocupación por el impacto que el evento podría tener sobre la infraestructura de la pista, que se utiliza habitualmente para actividades recreativas y deportivas. “El objetivo era evitar el desorden en las calles de la ciudad, dado que se esperaban al menos 100 motos que vienen a ver la película La Renga”, aclaró.
"Cuando hay un evento, nos llaman para opinar sobre el espacio donde se realiza, sobre cómo trabajamos la seguridad vial, el control urbano y la policía", explicó el funcionario, al tiempo que subrayó que la elección de la pista no respondía a un desinterés por parte de la municipalidad por los deportistas, sino a una cuestión de control de seguridad.
Ruiz abordó el conflicto con los guardavidas municipales, que han iniciado medidas de fuerza tras el despido de tres trabajadores. "Cada año se hacen exámenes físicos y psicológicos, y si un trabajador no aprueba esos exámenes, no podemos permitir que se desempeñe en funciones que involucran la seguridad de las personas. Los exámenes no fueron arbitrarios, sino que responden a normativas de seguridad. Si alguien no está apto para trabajar en el río, no lo vamos a contratar", sentenció.
Ante las críticas del sindicato, que denuncia que no se aplicó un concurso para el ingreso de nuevos guardavidas, Ruiz aclaró que el proceso consistió en un examen que realizaron tanto los guardavidas actuales como los nuevos aspirantes. "No hubo concurso, pero todos hicieron los mismos exámenes. Los que aprobaron, según las vacantes, fueron los que se tomaron", explicó.
El encargado de la seguridad también se refirió a las acusaciones de nepotismo que apuntan a la inclusión de familiares de funcionarios en el equipo de guardavidas. En este aspecto, Ruiz defendió la legalidad del proceso y sostuvo que, si bien es cierto que varios funcionarios tienen familiares trabajando en la municipalidad, estos deben cumplir con los requisitos establecidos. "Si cumplen con los requisitos, no hay razón para no contratarlos", concluyó