En las legislativas de este año, la ciudad tiene 23 listas diferentes. Una de ellas es la del Frente Socialista y Popular, encabezada por Sandra Romo como precandidata a concejal.
“Somos una alternativa viable. Ya estamos arrancando la campaña”, indicó la dirigente, quien enfrentará en las internas del partido Socialista a Miguel Campanella.
Adelantó que este jueves visita nuestra ciudad el referente de su fuerza, el precandidato a senador nacional Víctor De Gennaro, quien va a estar en la sede de ATE, calle 5 Nº 4231. En tanto, la próxima semana hará lo propio Juan Carlos Alderete.
Por su parte, José Caraballo, precandidato a consejero escolar suplente, manifestó que “hemos recogido un programa que es el sentir de millones, porque muchas veces las elecciones pasan y las propuestas quedan en las promesas de campaña”.
“Hay unos puntos que nos preocupan, como los despidos, y que sea plena la aplicación de la Ley de Emergencia Social”, expuso, en torno a una normativa que “fue ganada en la calle por varios movimientos sociales, pero falta la implementación total”.
Asimismo, expresó que “en cada esquina la gente te para porque no tiene trabajo, porque no llega a fin de mes. Por lo tanto podemos empezar a discutir desde ahí, pero hay una situación explosiva en cuanto a lo social.”
Respecto a salir a disputar las elecciones frente a un Cambiemos y a un kirchnerismo que polarizan entre sí, Romo reflexionó: “no sé si cuesta, sí vemos que son variantes de un mismo modelo. Vimos doce años del modelo anterior, donde los resultados no fueron los mejores”.
“Los resultados no fueron los mejores, porque el que antes no estaba bien hoy está peor que antes. Y Sergio Massa y Florencio Randazzo también fueron parte de este armado político”, aseveró.
Luego Caraballo planteó que “estamos apelando al voto de la gente para pasar las paso y que en las generales este una opción que no sea la bancada por los miles de millones de las grandes empresas y los grandes terratenientes”.
“Salimos a militar a pulmón con los recursos que tenemos. Es muy difícil que se aprueben las leyes para producir barcos en el Astillero, para que primero tengamos en vez de 3 mil casi 96 mil trabajadores. Y segundo, la Argentina se quedaría con millones de dólares que hoy se lo están llevando empresas extranjeras, hablo de nuestra zona que es una zona ribereña”, cerró.