Por Isaac Quispe Rojas de la redacción de NOVA
La madrugada del 13 de enero de este año, una niña de 13 años fue abusada sexualmente por Arturo Abolio de 43 años, el padrastro de su amiga en Villa Catella, un barrio del partido de Ensenada. Tras 47 días, el sujeto en mención sigue caminando a sus anchas por las calles del barrio como si nada.
🤜👨🚒 Aberrante: Bombero de #Ensenada está denunciado desde hace dos años por abuso sexual de tres menores de edad y sin embargo anda libre. Además incumple la perimetral y se pasea delante de sus víctimas 😠
— Revista El Tranvia (@RevistaTranvia) 1 de marzo de 2019
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El día anterior, la niña había estado jugando con su compañera del barrio y esa noche se quedó en su casa. Alrededor de la 4 am, mientras dormía profundamente, Abolió entró a la habitación y acechó: aprovechándose de su fuerza física la abusó.
La familia de la nena exige justicia y la detención del abusador que ya fue denunciado ante la DDI La Plata que ya tramitó la Investigación Penal Preparatoria (IPP) N° 2516/19. Al principio hubo una competencia entre las fiscalías por la fecha, porque ella fue abusada el 13 y la denuncia se hizo recién el 15 de enero.
Pero finalmente, tomó intervención la parte de delitos de abuso a menores y el caso recayó en el Juzgado de Garantías N° 4 y la investigación está a cargo del doctor Hugo Tesón, titular de la Fiscalía N° 8. Al no haber mayores avances en las pesquisas, Abolio estuvo un tiempo escondido en Punta Lara, pero ya hace unas semanas volvió a Villa Catella.
“Estamos pidiendo justicia y la pronta detención ya que hay muchas pruebas que dan a conocer la culpabilidad”, indicó Diego Donofre, padre de la niña, que luego aseguró que hay otra chica que también denunció ante la UFI 15 a Abolio, quien “es un hombre que tiene su costumbre en hacer estas cosas”, remarcó.
Por su parte, Jimena Martínez, madre de la nena, aseguró que fue amenazada en reiteradas ocasiones por allegados a Abolio, cuya familia vive a una cuadra de la víctima. Es por ello que Martínez pidió una orden perimetral para este grupo de gente, pero recién el 28 de febrero se consiguió la medida.
Hasta el momento ya hay dos demandas por violación contra el sujeto de 43 años, que habría cometido más abusos en el barrio. Donofre se lamenta que “no todos se atreven a denunciar, nosotros sí”, porque “nuestra hija está a cien metros del hombre que la abusó y esto no puede seguir así”.
La familia de la niña sostuvo que van a seguir luchando hasta que Arturo Abolio termine en la cárcel. “Esperamos que lo detengan de una vez por todas y se pueda hacer justicia. Por nuestra hija, por la otra chica y todos lo que no se atrevieron a denunciar”, concluyó Donofre.