BERISSO, Mayo 19.-(BerissoCiudad.com.ar) Fiesta, lo que se dice fiesta, se vivió anoche del Bosque a Berisso. Sí, con B de B Metropolitana. En la cancha de Gimnasia, en todo el trayecto que une
No se quedaron mucho tiempo en el estadio Juan Carlos Zerrillo. Lo justo y necesario. Después de la vuelta olímpica y los festejos en el vestuario, llegó el momento más esperado. No volvieron en un micro sino en un autobomba que se abrió paso desde la ciudad del inmigrante unos minutos antes de la finalización del clásico. Engañaron a la caravana de hinchas al tomar por la ex Río de Janeiro, y se fueron rumbo a la sede en Montevideo y 25.
Durante el día la ciudad estuvo paralizada por la gran expectativa, y por la noche hubo una gran movilización popular. Todos de celeste y blanco, claro, fueran o no hinchas de
Chicos y grandes, hombres y mujeres, abuelos, padres, nietos: todos se juntaron para gritar “dale campeón”. Un grito contenido desde 2002, cuando aquel equipo conducido por Don Gorostieta ascendía a Primera C y dejaba atrás para siempre
Igual, la gesta deportiva no tiene comparación. Y así lo entendió el pueblo villero, que se amontonó al paso de los jugadores para agradecer el ascenso y celebrar junto a los héroes de hoy, de mañana y de siempre.
Un día inolvidable para las familias París, Valdéz, Ré, Rodríguez, Kriwiña, Monasterio, Fernández, entre tantas otras identificadas con los colores, la historia y el crecimiento del club. Sólo algunos apellidos que representan la pasión por
A partir de ahora ya nada será igual.