Desde las 14 horas de este sábado, el barrio de Villa Progreso enfrenta una grave crisis de suministro de agua. La situación se originó cuando una ruptura en el caño maestro, provocada por acciones de terceros en una esquina cercana, inundó las calles y dejó a los residentes sin acceso al agua potable.
A pesar de los esfuerzos de los vecinos por contactar a ABSA (Aguas Bonaerenses S.A.), la respuesta de la empresa ha sido insatisfactoria. Durante más de seis horas, los residentes han estado tratando de informar a la empresa sobre la magnitud del problema, pero hasta el momento, no ha llegado ningún equipo de emergencia para solucionar el inconveniente.
Los vecinos se encuentran frustrados y preocupados, ya que la falta de agua afecta tanto a sus necesidades diarias como a la higiene y seguridad del barrio. Además, la situación se agrava con el riesgo de que el agua acumulada en las calles pueda generar problemas de salud pública.
"Estamos desesperados," comentó uno de los afectados. "No solo es que estamos sin agua, sino que también tenemos calles inundadas y no sabemos cuándo llegará una solución. La respuesta de ABSA ha sido nula hasta ahora", informó.
Hasta el momento, el delegado Maximiliano Alí y su ladero, Mario Calderón, no han ido a resolver la situación y, como hemos mencionado anteriormente, sus celulares están apagados para los vecinos de La Franja. Lo que genera más indignación y enojo.
ABSA, por su parte, no ha emitido ninguna declaración oficial ni ha enviado representantes para abordar el problema en el lugar. La falta de comunicación y acción por parte de la empresa está exacerbando la angustia de los residentes, que exigen una respuesta inmediata.
Este incidente resalta una vez más las preocupaciones sobre la gestión de ABSA y su capacidad para responder adecuadamente a emergencias en barrios periféricos. Los vecinos de Villa Argüello solicitan que se tomen medidas urgentes para reparar el caño maestro y garantizar un suministro de agua constante y confiable en el futuro.
Mientras tanto, la comunidad continúa enfrentando una situación crítica y espera que ABSA tome medidas decisivas para resolver el problema lo antes posible.