En un contexto marcado por la tensión interna del peronismo bonaerense, Axel Kicillof se prepara para encabezar el acto central por el Día de la Lealtad el próximo jueves 17 de octubre en Berisso. La ciudad, cuna del movimiento obrero que impulsó la liberación de Juan Domingo Perón en 1945, será el escenario de una jornada que promete un fuerte contenido simbólico y político, con Kicillof como principal orador.
El evento, que reúne a distintos sectores del peronismo, se da en medio de las crecientes tensiones entre las distintas facciones del movimiento en la provincia de Buenos Aires. En este sentido, Kicillof ha aprovechado la ocasión para diferenciarse de otros referentes del espacio, como Máximo Kirchner, quien recientemente encabezó un acto en La Plata. Mientras que Kirchner y su sector siguen jugando un papel importante, el gobernador bonaerense busca consolidar su liderazgo dentro del peronismo provincial, convocando a sus aliados más cercanos como los intendentes Fabián Cagliardi (Berisso), Mario Secco (Ensenada) y Julio Alak (La Plata).
Durante un acto en Ensenada, donde inauguró un centro de formación laboral, Kicillof adelantó su participación en el acto de Berisso con un mensaje contundente: "Es una provincia de producción y trabajo, este modelo que plantean no sirve. Me han invitado y voy a venir al kilómetro cero a mostrar que la Provincia no le tiene miedo a los cipayos ni a los vendepatria". Con este discurso, el mandatario reafirma su confrontación con el liberalismo que encarna Javier Milei, un rival político al que ha criticado con dureza en los últimos meses.
La elección de Berisso no es casual. La ciudad fue el epicentro de la histórica movilización de los trabajadores que, en octubre de 1945, marcharon para pedir la liberación de Perón, transformando este acto en un bastión del peronismo. Sin embargo, este año, la organización del evento se enfrenta al desafío de recibir a una gran cantidad de asistentes, lo que ha llevado a los organizadores a buscar un espacio que permita la presencia masiva de la militancia sin comprometer la logística del evento.
En el marco de esta celebración, las diferencias dentro del peronismo siguen latentes. Máximo Kirchner, líder de La Cámpora, ha enviado señales contradictorias sobre su relación con Kicillof, aunque intentó moderar el tono al felicitar públicamente al gobernador por su cumpleaños, subrayando la importancia de la unidad para enfrentar al liberalismo.
El acto en Berisso será un nuevo termómetro para medir el clima dentro del oficialismo bonaerense, donde la unidad sigue siendo un desafío por resolver.
