A la fecha no hay plata para los sueldos de trabajadores municipales, aunque por ley tienen desde la comuna tiempo de abonar hasta el día 10 

Frente a la situación de los trabajadores municipales y el retraso en el pago de haberes, desde el Ejecutivo municipal dejaron trascender que la situación económica es por demás complicada. 

Amparándose en la legalidad cuentan con tiempo hasta el día 10 del corriente mes para cumplir con el sueldo de los trabajadores, pese a que con el Sindicato de Municipales se acordó como fecha límite el 5 de cada mes.

Justamente el miércoles 10 desde el bloque oficialista se convocó a una sesión extraordinaria para tratar el proyecto de cheques diferidos y la adhesión a la ley provincial de responsabilidad fiscal, cuestiones que están intentando resolver en varias ocasiones sin encontrar la posibilidad de quórum, al que la oposición se resiste.

Si la comuna no se adhiere al pacto fiscal determinado por Provincia se coarta la posibilidad de ingresos económicos y, por consiguiente el pago de haberes, entre otras cuestiones. 

Ante la ausencia de dinero reconocida por las autoridades, el Sindicato de Trabajadores Municipales, a la fecha y sin recibir el depósito de sueldos llamó a una medida de fuerza que rige desde este sábado 6 de enero y que comprende la retención de tareas como primera medida.

Declarada la guerra entre los Sindicatos y el Ejecutivo y con la soga cada vez más tirante, para el intendente Jorge Nedela esto se presenta como un claro mensaje para la comunidad de Berisso, dejando claro que la misma no tiene que pagarles los sueldos a los sindicalistas.

De esta manera, el salario que percibe la comisión  de los sindicatos dejaría de ser solventado por la Comuna.

Otra medida que el Ejecutivo aplicaría para atenuar a los sindicatos, a quienes las autoridades tildan de “golpistas”, sería la quita de los Códigos de Descuento, instrumento por el cual el gremio les cobra a sus afiliados los préstamos, directamente desde sus recibos de haberes. Otro punto que generaría un debilitamiento económico para las representaciones de los trabajadores.