Este jueves por la mañana, Miriam, vecina de la comuna, se comunicó con BerissoCiudad para manifestar su indignación ante el servicio que presta PAMI, y contarnos la historia que le tocó vivir en primera persona.
Miriam está al cuidado de un abuelo de 84 años, quién en el día de ayer, a las 23 horas, tuvo una deficiencia pulmonar, por lo cual se llamó a PAMI para que mande una ambulancia por emergencia.
Como la ambulancia nunca llegó el hijo del abuelo tuvo que salir de su trabajo a la 1 de la madrugada para poder llevarlo al hospital.
Si bien desde el servicio de emergencias avisaron que la ambulancia había llegado hasta la puerta del domicilio, lo cierto fue que “nunca llegó” y “debido al retraso el abuelo quedó en terapia intensiva”.
“Es una vergüenza lo que está haciendo PAMI con los abuelos”, concluyó indignada.