En el marco del “Día de la Educación Especial”, conmemorado el 9 de agosto, invitamos a la directora de la Escuela N° 502, María Soledad Barboza, para hacer una reflexión sobre la importancia de garantizar este derecho y el rol de quienes o propician.
Para empezar, indicó que “la educación especial es la modalidad responsable de garantizar la igualdad de oportunidades, de diseñar estrategias y diversas trayectorias posibles que propician la inclusión de los sujetos con discapacidad temporal o permanente en todos los niveles y modalidades, asegurando el derecho a la educación permanente”.
Para ello es necesario “acompañar desde la primera infancia, con el servicio de atención temprana, hasta la adultez garantizando la inclusión laboral y proyectando ideales de vida formando ciudadanos autónomos e independientes”.
En base a su experiencia en la modalidad, comentó su tránsito por diversos caminos “pasando de la integración a la inclusión” donde el paradigma se instala como “modelo social de la discapacidad, y la misma es el resultado de la interacción del sujeto y su entorno dejando de ser un problema para sí, pasando a ser un tema de todos, encaminando y exigiendo una sociedad inclusiva y accesible”.
“La inclusión es un derecho de todos ya que todos somos diferentes, todos tenemos capacidades, culturas, ideales diferentes, cada persona es única”, afirmó la docente, para luego recalcar que “por eso, ser parte de la modalidad va más allá de la vocación, es tener la convicción de que todos hacemos la diferencia y formamos parte de la diversidad”.
En este 2020 tan particular, “nuestra Escuela N° 502 y todas las escuelas de Educación Especial, tuvimos que superar este gran obstáculo en el marco del aislamiento preventivo obligatorio, para seguir modificando estrategias y reinventar formas de seguir trabajando en pos de nuestros niños/as, jóvenes y adolescentes garantizando la continuidad pedagógica de aquellos alumnos que transitan diversos espacios, donde conjuntamente con el nivel en un trabajo corresponsable, al igual que con las familias siempre acompañamos a nuestros a protagonistas, los estudiantes, superando barreras que le permitan tener y forjar ideales de vida”.
Sobre el final de su reflexión, Barboza expresó: “la educación especial forja el alma para superar obstáculos y transitar la vida”.