El exconcejal del Frente Cívico y Social, Maximiliano Fernández, habló sobre lo sucedido con la instalacion de carteles para la campaña de Pablo Swar y apuntó a la inexperiencia de funcionarios y ediles oficialistas.

El pasado sábado, la colocación de cartelería tuvo un episodio particular cuando los militantes de Swar quisieron colocar uno "generoso" sobre Avenida 66: "Primero llegó la policía, más policía, después Control Urbano y más policía. Un total de cinco patrulleros, dos móviles municipales. Tanta gente que se podía hacer una fiesta", ironizó el dirigente en el aire de FM BerissoCiudad.

Allí las autoridades le informaron que "tenían una orden municipal para no colocar carteles y en ningún momento, contrario a lo que se dijo en algunos lugares, nunca hubo insultos o amedrentamiento; lo que si se planteó fue el hecho de no firmar el acta porque no estaba la firma de los responsables máximos de las áreas".

Pero sacando lo netamente descriptivo, Fernández consideró que esto fue algo político y se extrañó de algunos funcionarios como Federico Ruiz "que tiene militancia y experiencia en este tema".

"A mí me dan la sensación de que a este muchacho le dieron la estrella de sheriff del pueblo y le quedó grande", remató, apuntando a que "hay otras cuestiones por las que preocuparse y lamentablemente le prestan atención a ver si ponemos un cartel".

Sin ánimo de "usar a los empleados de moneda de cambio", apuntó a que los oficialistas saben lo que hacen e insistió en que "están para otra cosa más que para criticar un cartel. Me parece que se están equivocando. Al subsecretario de Seguridad, todos los trajes le han quedado muy grandes".

Por otro lado, recordó que hace un tiempo se dio una discusión sobre los funcionarios y los sueldos: "no estoy en desacuerdo con el sueldo generoso, pero sí de que el funcionario no esté donde tenga que estar. Cualquier vecino común dice 'este tipo se la lleva toda y dónde está'. Hay cosas más urgentes para atender".

Como nacido y criado en Berisso, Fernández advirtió que "nunca se vieron hechos delictivos con la violencia que se están dando; y parece que algunos con una fiestita en el Parque Cívico los problemas de la ciudad desaparecen".

"Lo que pasó es un acto de desesperación. Esperemos que no vuelva a ocurrir, pero nosotros estamos con la mirada en otra cosa, en un diciembre donde el vecino sea protagonista de la ciudad, no que las decisiones sean faraónicas cómo se vienen dando en estos años", definió.

Mientras tanto, "hay tipos que por prometer no pueden ir a ningún lado. Ni en los semáforos pueden parar. Y es raro que el subsecretario no haga esas observaciones de funcionarios que no paran en los semáforos o en la avenida para ir a comprar".

Con la experiencia de haber trascendido el Concejo Deliberante, manifestó que nunca habló en términos personales de nadie pero que ahora a va empezar a hacer excepciones. Para empezar arrancó con la  soberbia de ellos ediles e inexperiencia de la actual presidenta Martina Drkos "que cometió errores garrafales".

"Dentro del oficialismo no hay conductor", siguió, "porque una persona que se sienta en una banca y lo único que genera son risas socarronas, chicana y autodiscurso no es un conductor. Un conductor es el que encuentran puentes con los otros arcos políticos para construir un proyecto en común".

Por ello, señaló que el actual es un Concejo muy ausente, sobre todo de las problemáticas "reales". Es algo "muy vacío, en cuanto a autoridades, manejo, de poca experiencia política".

Por último, hizo una distinción diciendo que "la gente no está asqueada de la política, sino de que le tomen el pelo. Está asqueada del verso, de que la boludeen en la cara".