Vecinos de calle 128 y 35 compartieron las imágenes de la cuadra para visibilizar una realidad que preocupa a quienes viven allí.
Se trata pozos y zanjas hechas por un grupo de frentistas, con el objetivo de improvisar desagües.
El problema, además del peligro que ello genera, es que todo quedó al descubierto: "por allí pasa el micro, autos, personas a pie, y de noche no se ve nada".
Una medida que se tomó por necesidad, pero no colabora con el orden y seguridad del resto del barrio.