La localidad ribereña de Ensenada tiene un frente costero de 18 kilómetros, playas bajas y la última fracción de la selva subtropical, con especies exóticas de flora y fauna. El río más ancho del mundo baña esa costa. Una descripción que la asemeja al Paraíso.
El año 2013 se despidió con altas temperaturas que se prolongan en este enero tórrido. Lo que podría ser un lugar de esparcimiento y un paliativo para la intensa ola de calor está amenazado.
La contaminación del Río de la Plata, la desaprensión de algunos turistas y la inacción, atentan contra los que menos tienen que buscan en esas playas un poco de alivio en este verano que se presenta agotador.
Las imágenes corresponden al primer fin de semana de 2014, tomadas en la zona conocida como “La Pérgola”, una de las más frecuentadas por el turismo.
Fuente: PRIMERA PAGINA