Cerca de las 15 horas de este jueves, Infantería y Caballería reprimieron brutalmente a las organizaciones políticas, sociales, sindicales y estudiantiles que se manifestaban frente a la Legislatura Bonaerense.
Al ver a los militantes de su espacio con heridas de bala de goma y a varios abuelos con serias irritaciones en los ojos a causa de los gases lacrimógenos que lanzaron los efectivos, el intendente de Ensenada Mario Secco ingresó a la Cámara de Diputados con el único afán de detallarle a los legisladores la tensa situación que se estaba viviendo en la calle.
Luego de poner sobre la mesa central del Recinto los elementos que utilizó la Policía para reprimir y que quedaron desperdigados en la Avenida 7, con la finalidad de retratar la violenta represión de las fuerzas, se retiró junto al grupo de funcionarios y militantes que lo acompañaban.
Lejos de irrumpir la sesión, desde la ciudad ribereña aseguraron que los propios diputados invitaron al jefe comunal a ingresar al Recinto que se encontraba en cuarto intermedio. ¿El objetivo? Explicarles al presidente de la Cámara y al resto de los legisladores la violenta situación que se estaba viviendo en la calle mientras se desarrollaba la misma.
La gran cantidad de manifestantes que se movilizaron a la Plaza San Martín de La Plata visibilizaron su rechazo con respecto a la modificación del régimen jubilatorio en el Banco Provincia, la sanción de la ley de reforma de ministerios y la ley de ART, que representan un claro embate del Gobierno para aplicar su plan de ajuste y seguir castigando a los sectores trabajadores y a los más vulnerables de la sociedad.
A pesar del blindaje mediático hacia Cambiemos, el pueblo demostró su desconformidad en las calles. A su vez, durante la pacífica protesta, los gremios se mostraron unidos para ponerle un freno al neoliberalismo y advirtieron que no se van a intimidar por la represión estatal y la persecución judicial.