En los últimos días, la esquina de calle 16 y 160 se convirtió en un espacio cultural donde, a través del arte, se genera un intercambio entre artistas y vecinos que reviven la historia de nuestra ciudad.
La iniciativa surgió hace un mes, mediante el pedido de una pareja -que habita en la propiedad- donde se está desarrollando un mural con diversas temáticas de propias de Berisso.
El encargado de llevarla adelante es el muralista Jony Go, quien aceptó la propuesta de inmediato y puso manos a la obra para intervenir en una pared de más de 90 metros cuadrados, desplegado en ocho paneles de más de tres metros de largo y ancho.
"Ni bien Javier y Claudia me propusieron este proyecto comenzamos a investigar en diferentes páginas sobre información de la fundación y cultura berissense, la conexión y compromiso fue instantánea”, comentó el profesor y Licenciado en Artes.
Mediante el museo e informes fotográficos se fueron eligiendo y consensuando personas, paisajes y símbolos referidos al desarrollo industrial, el papel de los inmigrantes europeos que formaron colectividades y dieron impulso a la idiosincrasia del lugar.
Además, la composición incorpora la producción de vinos regionales, las casas de chapa como distintivo arquitectónico, La Balandra, personajes como "siete sacos" que fue reconocido por los vecinos como figura local a pesar de no haber nacido aquí, la figura de una chica con vestimenta tradicional Italiana y la Toma de agua donde se encuentra el museo.
Por su parte, Javier y Claudia solicitaron que el mural refleje la memoria de nuestro pasado, que cada persona que lo mire “piense que el mural es un puente que comunica lo que nos une como sociedad y valores que compartimos”.
“Que las nuevas generaciones que observen la pared vean lo que fuimos, lo que somos para que sirva como contraposición de lo que hicimos y hacemos”, añadieron.
En cuanto a la intervención el artista dijo que a medida que se va realizando “la gente pasa, comenta, tomamos mates y cuentan historias. Esta bueno que se vayan acercando. Aparte, no es un mural de protesta sino más bien decorativo que representa los orígenes, las raíces, que interpela lo que somos y lo que fuimos”.