BerissoCiudad dialogó con la doctora Guadalupe Canosa -ingeniera, docente e investigadora de la UTN y del CONICET- y con la doctora Paula Alfieri -bióloga, docente e investigadora de la UTN y el CIC- quienes trabajaron en la creación de un químico que se complementa como medida de prevención contra el coronavirus.
“Desde la Facultad encontramos que la pandemia nos trajo en un principio dificultades que terminaron siendo desafíos”, coincidieron. Desde dar clases hasta cómo trabajar en el laboratorio o los trabajos indicados a becarios, fueron algunos de los ejes abordados.
Las científicas trabajan desde hace más de ocho años en la creación de protectores para maderas y en el marco de la emergencia sanitaria diagramaron la investigación buscando colaborar en la lucha contra el coronavirus.
“Pensamos en una primera instancia en la primera línea de médicos, médicas, enfermeros y enfermeras”, explicó Canosa.
Por su parte, Alfieri añadió sobre el desempeño científico en el país que “se evidenció la rápida respuesta que hay en la ciencia en Argentina. Frente a una situación desconocida cómo es una pandemia con un virus desconocido que aún se sigue investigando desde diferentes puntos hubo respuestas muy buenas”.
La labor de las científicas y los avances son reconocidos a nivel nacional y también internacional, con un trabajo abocado a la elaboración y el perfeccionamiento de protectores de materiales. En este punto, la participación interdisciplinaria es fundamental.
“Este producto refuerza el efecto barrera que generan los elementos de protección, barbijos, máscaras, camisolines. Es un spray que impermeabiliza la zona y las microgotas que llevan la partícula viral no quedan impregnadas en el material, por eso evita el riesgo de contagio de contagio cuando uno lo toca y en caso de que la carga viral sea muy inteligente tiene nanopartículas que desactivan la particular viral. Es un refuerzo del efecto barrera y se evita el contagio por la mala manipulación de los elementos de seguridad”, detalló con precisión la bióloga.
Cómo todo elemento innovador lleva mucho tiempo y estudio. “Recibimos un financiamiento del Ministerio de Ciencia, Tecnología e Invocación de la Nación para avanzar. Ahora trabajamos en lo que es la aprobación porque necesitamos ensayos específicos y no tenemos la capacidad en nuestros laboratorios para hacerlos, nosotras No trabajamos con virus y ahora estamos en esa etapa”, añadió la ingeniera.
“Cuando esté esta etapa podemos empezar a pensar en producirlos, en principio, en una escala pequeña y mediana dentro de nuestro laboratorio y luego dar un paso más”, anexó la doctora Canosa.
Vale destacar que desde los ministerios de Salud, Transporte y otras áreas también se interesaron por estos avances científicos.
“También puede ser útil en el periodo de post pandemia cuando se vuelva por ejemplo a las escuelas y universidades porque se va a volver sin vacuna probablemente”, recalcaron.
En una instancia de prueba con virus y ensayos para continuar con la optimización del producto es que las científicas reconocieron destacaron y valoraron la formación académica pública y el apoyo del Estado. “Sin apoyo de quienes están en el mando no podemos hacer nada. Con el producto por ejemplo si no tenemos apoyo de los ministerios esto no se implementa y queda todo en nada”, graficó Alfieri.
“También podía haber sido una decisión política financiar a una gran empresa que nos haga alcohol al 70 por ciento. En este caso nos sentimos apoyadas y de inmediato”, aportó Canosa.
Finalmente, subrayaron que “lo importante de este resultado es nuestra formación pública, la expectativa de esto es un poco decir estamos devolviendo a la sociedad un poco de su aporte en nuestra educación. Esto ahora es tangible y uno trabaja para eso, es importantísima la educación pública y tiene que seguir siendo pública y gratuita”.