Tras las idas y vuelta que se dio en torno al pedido de la familia la internación Maximiliano Barragán, el edil accedió al pedido si se cumplía las garantías de no ser internado y que lo acompañen los allegado que el designaba.

 Cerca de las 20 horas en un departamento de la calle 23 entre 164 y 165 de su propiedad, el concejal del Frente Renovador llamó a conocidos, militantes del Peronismo y  a los medios para negociar su entrega para ser trasladado a la clínica que dictó el Juzgado de Familia, tras estar dando vueltas desde las 16 horas en su vehículo para no ser internado.

En la entrada de la vivienda se encontraba la esposa y familiares acompañados con personal policial para garantizar el pedido del juzgado interviniente.

A esto ante la presencia en primer término de BerissoCiudad, la esposa del edil increpó al periodista que está cubriendo en vivo para la red social, lo mismo hizo junto a sus cuñadas en la puerta de la Comisaría Primera al cronista en busca de “preservar” la privacidad del legislador municipal público.

Tras esto Barragán desde una ventana y a viva voz negoció cómo sería su traslado y pidió que se le garantice que les acompañen las personas que él designe, a lo cual los oficiales presentes le indicaron el procedimiento.

Luego de esto, el concejal comenzó a narrar las circunstancias que lo llevaron a estar en esa situación.  Se refiere a propuestas políticas para garantizar el quórum  y aprobar los tres expedientes que necesita el Municipal de Jorge Nedela.

Mencionó que los “acuerdos” -haciendo el movimiento de la mano con el puño cerrado de arriba abajo- va desde puesto de funcionario para él, como para su referente del massismo en Berisso (Ángel Celi) de parte de allegados al intendente y de la cúpula del Frente Renovador provincial como los senadores bonaerenses Sebastián Galmarini y Gustavo Carvallo, a quienes dijo que no se iba a vender a algo en contra de lo trabajadores municipales y de quienes dejó entrever una supuesta amenaza.

Como así mencionó “arreglos” de los gremialistas del STMB, Marcelo Peroni, Claudio Hiser y Alfredo Dulke con el Ejecutivo, que en esto no dejó a fuera de esos “tratos” a los ediles de Unidad Ciudadana como Sebastián Mincarelli y Fabián Cagliardi.

Acto seguido, mencionó que a no tener lo que querían de él, fueron con su familia y apuntó a que usaron a su esposa “comprándola” con sumas de dinero para que los internen, como también apuntó que a su mismo padre le ofrecieron lo mismo para que sea internado, y le den la Licencia de su banca y asuma Lorena Rusillo y efectivizar el quórum de la próxima sesión del Concejo Deliberante.

A esto la hermana interrumpió diciéndole que por qué no contaba que decía que sus padres están en una secta y que amenazó con quitarse en la vida, acciones que llevó a la familia el tratamiento psiquiátrico.

Tras tener la palaba del Comisario de la comisaría Primera y del Jefe de Comando para ser llevado a una revisión médica en el Policlínico San Martín para ser llevado luego a la clínica designada por el Juez de Familia que libró  la orden.