Lamentablemente la historia de Berisso vuelve a repetirse, ningún funcionario o dirigente se hace cargo de lo que hace.

En este caso funcionarios de Fabián Cagliardi se hicieron los "dolobus" en un mural que muestra a los trabajadores y la historia de Berisso impregnada de miles de historias, recuerdos y la lucha de los mismos por ver crecer un sustento laboral.

Lamentablemente Martín “Don Tapón” Fernández parece que se olvida de la historia de Berisso o bien, no tiene un libro o prensa que lo ayude a pensar un poco y a través de Twitter dijo: “El mural pintado en Berisso por las elecciones ya había sido vandalizado”, sale a justificar lo injustificable, igual que otros funcionarios.

Claro, en vez de hacer autocrítica y decir: “Dejemos todo como estaba antes de que se vandaliza el día uno” pensaron en “pongamos Fabián 2023”.

La política en Berisso vuelve a ser objeto de crítica por propios y ajenos pero, ¿alguien recuerda de que era el mural? Ni oficialismo ni oposición, porque días atrás también Pablo Swar realizó su pintada, así como se ve en la foto que acompaña esta nota.

Pongamos un poco de contexto, Cristian del Vitto pintó este mural, ubicado en 122 y 79, titulado La identidad en 2006, junto con el artista Luis Farías y la obra había sido tapada anteriormente con grafitis.

La obra fue con técnicas de esmalte sintético. Medidas 4m x 8m.

¿Quién se hizo cargo de su error?

Por ahora, solamente decidieron pasarse el problema, del peronismo a Juntos, de Juntos a movimientos sociales y de vuelta al Ejecutivo de Cagliardi. Directamente en ninguna de las cabecitas de la mesa, se pensó volver a comunicarse con algún artista para dejar la obra en condiciones.

Claro, cuando se habla directamente de hacer campaña hay un “todo vale” pero… cabe aclarar que este 2023 iba a ser distinto. ¿por qué? porque se había puesto en meta mantener una “ciudad limpia”, es decir, en época de elecciones cuidar donde poner banderas, pasacalles, pintadas, cuidando los patrimonios.

Eso, lamentablemente, duró 24 horas o tal vez solamente cuando salieron en los medios a hablar del tema.

Hoy es un viva la pepa, con “Don Tapón” que sigue metiendo la pata, con un Ejecutivo que da explicaciones burdas y una oposición que, por más que también pintó sobre el mural como se difundieron imágenes, nunca salió a pedir perdón.

En algún momento de la vida, los berissenses entenderemos que es más importante un patrimonio, recuerdo o algo de historia impregnado en los muros, como los que realizó Vitto y no simplemente, un nombre que cada 4 años se repinta con otro, buscando la “soberanía de la calle”.