Por Isaac Quispe Rojas, de la redacción de NOVA

Arturo Sánchez, trabajador migrante y candidato del Frente Izquierda y los Trabajadores, denunció la situación de explotación y opresión que sufren los migrantes en el Polígono Industrial de Berisso, de donde fue despedido de manera discriminatoria y, por ello, exige ser reincorporado a su puesto laboral.

En diálogo con NOVA, Sánchez señaló: “Las condiciones de trabajo son muy precarias, hay riesgo de accidentes todo el tiempo, estamos en negro y tenemos ritmos de trabajo de diez horas. Además, comemos en las máquinas o vamos al baño muy rápido para no parar la producción. Son ritmos muy exigentes”.

El Polígono es un conglomerado de pequeñas empresas, está ubicado en la calle New York y Marsella, donde años atrás funcionó el frigorífico Swift. Alberga 78 fábricas, empleando alrededor de 650 personas en las diferentes áreas donde se elaboran productos textiles, plásticos, pinturas, alimentos, envases para farmacia.

Arturo entró a trabajar, aproximadamente, hace seis meses. Su salario mensual era de 6 mil pesos, muy por debajo de la línea de pobreza. “Como la mayoría de los migrantes solo podemos acceder a ese tipo de trabajo, muy precario y en negro. No solo pasa donde estoy, sino es una realidad que viven la mayoría de los trabajadores”, admitió.

De acuerdo con la Ley 13.651 y su Decreto Reglamentario 1.480 de creación, el polo industrial berissense se encuentra bajo la conducción del Ente Administrador que conforman el Municipio, la Cámara Empresarial del Polígono Industrial y el gobierno de la Provincia de Buenos Aires.

Los sueldos rondan los 250 pesos por día. Algunos trabajadores están en blanco pero por miedo a ser despedidos tienen que soportar intensos ritmos laborales a costa de su salud. El conglomerado fabril no tiene  ningún tipo de fiscalización del estado municipal ni provincial, por eso hay una gran cantidad de empleados en negro.

Sánchez se presentó como candidato por el Frente de Izquierda y los Trabajadores para las elecciones legislativas, tratando de levantar la voz de los más explotados. Un día antes de las PASO, la empresa Plásticos Tolosa alegó deudas de luz y el cierre del galpón y lo despidió junto a otro compañero. Pero la realidad es que hoy sigue funcionando normalmente.

En ese sentido, expresó que “es un despido discriminatorio porque no es por laburo, de hecho mi jefe siempre me reconoció como un buen trabajador; la única razón es que me presenté como candidato”.

Más adelante, relató que fue con sus abogados para intimar a la empresa a que lo reincorporen bajo convenio laboral vigente. Asimismo, el jueves de la semana pasada, el intendente de Berisso, Jorge Nedela, se comprometió a generar una audiencia con la fábrica para resolver la situación. 

“No puede ser que te despidan por el hecho de presentarte como candidato. Están violando la Ley Electoral que dice que ningún candidato, de ninguna fuerza, puede ser despedido, porque atenta contra el derecho a participar libremente de elecciones”, agregó.

Por último, explicó que hay muchos trabajadores migrantes cuya situación es preocupante sobre todo en el sector textil, con sueldos muy bajos. “Estamos haciendo una campaña para que toda la comunidad nos pueda ayudar a difundir la luchar por la reincorporación y contra el trabajo precario. Vamos hacer un festival en el local del Frente de Izquierda de Berisso el 15 de este mes”, finalizó.