Tras culminar la 20a Fiesta del Vino de la Costa de Berisso, el referente e impulsor del proyecto que concierne a la Cooperativa de la Costa, Martín Casali, habló del trabajo realizado que llevó a la permanencia y vigencia de este producto hoy reconocido a nivel provincial.

"Contento por una fiesta más", comentó, a pesar del cansancio, al tiempo que sostuvo que seguramente la semana próxima comenzarán con los preparativos del próximo año.

Mientras tanto, tendrán lugar las participaciones en distintos espacios gracias una ley que dio pie al encuentro "Vinos de Buenos Aires", donde el vino de la costa se presenta con una etiqueta en cuya descripción se destaca que es "el primer vino de Buenos Aires".

Por otro lado, mencionó que su adhesión a la organización se dio en el 2009, y que en 2015 sumaron a dos facultades compañeras, la de Exactas y Trabajo Social llegando a formar las cinco patas esenciales para dicho trabajo en conjunto, "con años buenos, malos, con recursos para financiar un montón de cosas, y otros no".

Pero en lo que refiere a la última fiesta en particular y las quejas que pueden llegar a surgir desde distintos sectores, aclaró que "no se puede incluir a todos los que quieren participar todos los años, porque son sólo tres noches y allí hay que considerar a todos los estilos, con el armado que ello implica. Tuvimos un criterio que lo coordinamos con Cultura; y ojalá que la fiesta dure más tiempo y podamos incluir a más".

Entre los saldos positivos, señaló la apertura de la fiesta en el Salón griego, donde "se hicieron reconocimientos a personas que colaboraron, que hicieron un trabajo sostenido en el tiempo, gente de la Facultad que se la jugaron por nosotros, y productores que fundaron la cooperativa, como Ruscitti, "Chango" y Rubén Verón".

Respecto a los cambios del vino y su elaboración, marcó que "la calidad va a formar parte de cómo viene el clima en la cosecha. El año pasado a través de un proyecto de la Cooperativa y el financiamiento de desarrollo agrario adquirimos un equipo de control temperatura en la fermentación. En eso el vino cambió para bien".

También indicó las dificultades a la hora de financiar la fiesta. "Nosotros siempre estamos por detrás de la inflación porque no podemos aumentar cada veinte días. Pero creo que esta fue una buena fiesta", planteó, añadiendo que la misma "se  financia por el aporte del Estado" y que "la Cooperativa no gana absolutamente nada de la fiesta, porque sólo recauda con la venta del vino".

"En otro contexto se intentó privatizar la fiesta, pero siempre marcamos que ese no es el perfil. No fue magia implementar este perfil de fiesta y mantenerse 20 años", recalcó.

Y las sorpresas de esta 20a edición con el primer puesto para el tinto seco a cargo de mujeres que hace dos años comenzaron con un taller de "vino de mujeres" y hoy tuvieron su premio fruto del esfuerzo.

Lo próximo será, entre otras cosas, "captar a nuevos productores, con financiamiento y asesoramiento técnico".