En comunicación telefónica con BerissoCiudad en Radio, César, vecino de Nueva Villa Argüello, expresó su descontento con el accionar de los funcionarios y la falta de interiorización acerca de las problemáticas vigentes en el barrio.
Se trata de un inconveniente que viene desde el año 1986 “y todo quedó ahí porque los trabajos se hicieron mal, pero nadie lo pudo revertir, a pesar de que la mayoría de los vecinos pagamos mensualmente los impuestos y aportamos al Municipio”.
Lo llamativo, fue que “todas las gestiones hicieron su campaña con la promesa de dar una solución, sobre todo ante la contaminación que padecemos en la ciudad, pero después desaparecieron”.
En medio de todo esto, “lo que se priorizó fue el asfalto de lo que hoy conocemos como la calle 8, para un supuesto beneficio de la gente, pero eso no ocurrió, porque toda el agua que escurre va en dirección a la 131 y las adyacentes”, abundó el frentista.
A lo largo de todo este tiempo, describió, “todo fue remendado y ahora esto se ve mucho más porque está todo deteriorado, ya que no se hicieron las cosas como corresponde”.
“Escándalo y circo que sí se ve, por ejemplo, con el tema de la desinfección, cuando vienen con los camiones”, refutó, dando a entender que si nos enfocamos en la ética “los políticos no entienden absolutamente nada de ello”.
“Nuestros representantes no están a la altura, ni siquiera a la de quienes los hemos votado creyendo en ellos, cuando en persona han visto los problemas”, anexó.
“No sé cómo se han olvidado tan rápido, cuando ellos también han caminado por el barrio. Por eso decimos que no están capacitados”, concluyó, entendiendo que la gestión debe escuchar al vecino y resolver los problemas cotidianos.