Tal y como fue anunciado por el sector de guardavidas, este jueves se presentaron frente al Palacio Municipal, sito en calle 6 y 166, donde instalaron una suerte de acampe a modo de protesta por la deuda que la comuna mantiene con ellos.

Con una amplia convocatoria, explicaron ante este medio que “estamos reclamando el pago del 50 por ciento que todavía se adeuda de las vacaciones no gozadas de la temporada desde abril”, dijo el secretario sindical, Martín Idiart.

Además de esto, los trabajadores reclaman una “deuda histórica” de 20 millones de pesos, a “lo que se sumó el no pago de un dinero que quedó de esta temporada”.

Cabe reseñar que semanas atrás también se hicieron presentes con una manifestación mediante la cual llegaron a acordar el pago del 50 por ciento de la última deuda. “Pero lo qué pasó es que se incumplió”, añadió Idiart. Hay que agregar que en aquellas instancias, quien había tomado la palabra fue la secretaría de Gobierno, Aldana Iovanovich.

Ante la situación de no poder entablar diálogo con la funcionaria en cuestión, “quien sí se acercó fue (el subsecretario de Seguridad) Néstor Epeloa”, concretó el referente sectorial, apuntando que “es una decisión política la de pagar o no y quien toma la decisión es el intendente. Molesta el manoseo con algo tan sensible como es el sueldo”.

Entre las negociaciones y los diálogos con las autoridades, el referente de guardavidas apuntó una vez más a la escala de responsabilidad indicando que “ni el intendente ni la secretaría de Gobierno se apersonaron”.

Sobre la deuda histórica, el sindicalista manifestó que “esta gestión sale a desconocerla, no a hablar para afrontar una modalidad de pago. Ante este situación, se plantea una irresponsabilidad institucional porque en el caso de Quique (Enrique Slezack) ordenó pagarlo y cambió la gestión, Jorge Nedela no la pagó. Y nosotros no podemos más que reclamar”.

“Nosotros eso ya lo judicializamos pero ahora está la deuda del mes, que es muchísimo menos y eso tampoco lo pagaron”, concretó el entrevistado al aire de la 88.5.

Por otro lado, lanzó contundentemente: “No estamos de acuerdo con que tomen represalias económicas con nosotros porque no somos obsecuentes. No nos vamos a ir hasta que nos paguen o nos den una fecha cierta”.

Para cerrar, subrayó con referencia al coordinador municipal de guardavidas, César Pagano que no se hizo presente y al preguntarse dónde está, se autocontestó: “No lo sabemos”.