Eduardo "Pollo" Villar, miembro de la Comisión Directiva de Bomberos Voluntarios de Ensenada, compartió en una reciente entrevista con el programa Bomberos al Aire una impactante historia sobre su valiente accionar en medio de una fuerte tormenta en Punta Lara. A sus 56 años, Villar es un guardavidas con más de 35 años de trayectoria. Durante la entrevista, Villar relató cómo, junto a un compañero, lograron salvar a una mujer que intentaba suicidarse al arrojarse al agua en medio de una noche tormentosa.
"Estábamos recorriendo varios lugares esperando la tormenta, cuando vimos que una mujer se metía al agua. No dudamos ni un segundo en lanzarnos para rescatarla", comentó Villar, destacando la rapidez con la que actuaron junto a su vecino, Hugo Lupi, quien también participó en el rescate. Según Villar, la situación era sumamente peligrosa debido a la oscuridad y la fuerte lluvia. "La mujer estaba a 200 metros y se había desmayado. Fue difícil, pero logramos sacarla y reanimarla. Por suerte, todo salió bien", añadió.
Durante la charla, Villar reflexionó sobre la naturaleza de su vocación tanto como bombero como guardavidas. "Es nuestra obligación. Así como un bombero corre hacia un incendio, nosotros corremos hacia el agua cuando alguien está en peligro. No importa el momento ni las condiciones, siempre estamos listos", afirmó con determinación.
Además de su labor voluntaria, Villar es trabajador municipal en el Fuerte Barragán y el Complejo Cristina Kirchner. Al hablar sobre el trabajo en conjunto con la municipalidad, destacó el apoyo constante que reciben: "Bomberos y la municipalidad trabajamos mano a mano. Mario Seco ha facilitado un trabajo coordinado entre las distintas áreas, como el desarrollo social, turismo, y obras públicas, lo que ha sido clave en situaciones de emergencia, como inundaciones", explicó Villar.
La historia de Villar y su entrega hacia la comunidad es un claro ejemplo del compromiso y dedicación que caracteriza a los bomberos voluntarios de Ensenada. Su valentía y la colaboración con otros organismos siguen siendo un pilar fundamental en la protección de los vecinos de la zona, especialmente en situaciones críticas.