Este jueves por la tarde, vecinos de Villa Zula hicieron un descargo por la salud de una perra “a la que nadie asiste”.
Se trata de un animal que “vivía en la puerta de la Comisaría Segunda y a la que los efectivos siempre le daban de comer”.
Pero este jueves, cerca de las 11 de la mañana, el animal comenzó a convulsionar; motivo por el cual, un vecino se acercó hasta la Comisaría para pedirles que la vayan a buscar a calle 175 entre 34 y 35, debido al estado en el que se encontraba.
Para sorpresa del frentista, quienes estaban en la institución le manifestaron que “no podían hacer nada y que no iban a sacar a la perra de allí porque no les correspondía”.
Una situación que indignó a quienes se fueron enterando de lo sucedido y que, hasta el cierre de esta nota, no obtuvieron respuestas.
También, aprovecharon la oportunidad para señalar que en dicha Comisaría “no toman denuncias por maltrato animal, a pesar de la infinidad de quejas presentes”.