Un complicado panorama

La preocupación de Raúl Pérez y la pesadilla del oficialismo

El diputado plantense Raúl Pérez tiene por delante un complejo panorama.
El diputado plantense Raúl Pérez tiene por delante un complejo panorama.

LA PLATA, Julio 10.-(BerissoCiudad.com.ar) Las elecciones del 28 de junio generaron numerosas sonrisas en el extenso arco opositor al kirchnerismo. Su contracara puede hallarse en los rostros de ceños fruncidos que por estos días se pasean por los pasillos de diversos edificios gubernamentales.

 

En el caso particular de la Cámara de Diputados de la provincia de Buenos Aires, hay un ceño fruncido que sobresale entre los demás, y que puede encontrárselo en la cara del diputado provincial y presidente del bloque del Frente Justicialista para la Victoria, Raúl Pérez.

 

Sucede que por estos días, el legislador bonaerense tiene serios dolores de cabeza pensando qué le ocurrirá en el futuro, cuando comience a cambiar el panorama político dentro de la Cámara Baja, fruto de la derrota del kirchnerismo en la provincia de Buenos Aires.

 

Esto es así porque ahora la presidencia del bloque oficialista, que hasta el momento le correspondió, se halla en serias dudas. Raúl Pérez fue presidente de un bloque que ocho meses atrás estaba conformado por 62 legisladores, de un total de 92 que posee la Cámara.

 

Hace unos meses, con la ida (o huida) de Felipe Solá, la unidad se rompió con el desprendimiento de diez diputados que respondían al ex gobernador de la provincia de Buenos Aires. De esa forma, la cantidad de legisladores del bloque comenzó a mermar y sufrió otro golpe luego de la debacle del kirchnerismo, cuando figuras de la talla de Laura Berardo abandonaron el barco, en este último caso, para conformar el bloque Libres del Sur.

 

Con todo lo sucedido, el bloque oficialista llegó a la actualidad con una mayoría que aun se sostiene, pero que resulta bastante más minoritaria que la que existió durante su apogeo. Para el 10 de diciembre, el oficialismo ni siquiera tendrá la mitad más uno, sino que pasará a conformar la primera minoría.

 

En términos políticos, eso significa que para sacar a flote las leyes y designar a las autoridades de la Cámara, los diputados K tendrán que negociar con la oposición. En este marco, el mayor riesgo es que esta última se agrupe para elegir al presidente y al vicepresidente de los diputados. Esto es posible gracias a la nada despreciable cantidad de representantes que logró ingresar el  Acuerdo Cívico y Social y Unión PRO, que en poco tiempo más constituirán entre ambos la mayoría parlamentaria.

 

Todo esto se suma al riesgo del legislador Raúl Pérez de perder su lugar como posición dentro del bloque, que es la garantía de su poder, a través del manejo de la abultada caja de la mayoría legislativa y de su distribución entre los diversos compañeros de bancada.

 

EL DECLIVE OFICIALISTA EN LA OCTAVA SECCIÓN

 

Por otro lado, la sección capital tenía un total de seis diputados en el bloque oficialista, ya que si bien algunos venían de otros sectores, estaba integrado por Carlos Quintana, Valeria Amendolara, Liliana Di Leo, Alberto Delgado, Carlos Bonicato y el ya citado Raúl Pérez.

 

Luego de un triste rendimiento electoral, el kirchnerismo platense perderá cuatro representantes en la Cámara Baja y contará, como sección octava, de solo dos legisladores, es decir, Raúl Pérez y el hermano del intendente local, Gabriel Bruera.

 

En este punto, es importante recalcar la nueva posición del ex jefe comunal platense Julio César Alak, quien fuera designado ministro de Justicia y Seguridad de la Nación.

 

El cuatro veces intendente no oculta su desencanto con Pérez, y esta es una cuestión que no le resultará nada favorable, ya que además del exceso de bronca, el turco recobró poder y decisión dentro del kirchnerismo, lo cual complicará aun más la futura posición del presidente del FJpV-PJ dentro del espacio K.

 

LA POSICIÓN DE BRUERA

 

Si algo le faltaba al diputado electo Raúl Pérez era una disputa interna en la ciudad, y así parecieran confirmarlo los rumores que giran por los pasillos del palacio comunal. En ese sentido, desde el bunker bruerista, comenzó a correr la versión de que Gabriel Bruera probablemente no respalde la intención del platense de mantenerse en la presidencia del bloque.

 

“Hay versiones que aseguran que quería tener protagonismo en la Cámara él, y no apoyar a Raúl Pérez. Encima jugaron mal con los K y el turco, que ahora que sumó poder, les va a trabajar en contra”, explicó a este medio un hombre del gabinete bruerista.

 

La otra versión que circula fuertemente, son las charlas de café entre dirigentes del Acuerdo Cívico y Social y Unión PRO, tendientes a coparle la presidencia de la Cámara al oficialismo. La disputa entre estos dos espacios, por estas horas, se centraría en elegir al afortunado que ocupará dicho cargo.

 

Una situación similar puede encontrarse en la Cámara de Diputados de la Nación, aunque por lo visto, todo pareciera indicar que finalmente la oposición le dejará la presidencia a la primera minoría, es decir al FJpV, como un gesto político.

 

A cambio, el oficialismo deberá pagar un elevado costo, según se cree, cediendo la vicepresidencia y una fuerte injerencia en el reparto de “la torta”.

 

Esto se traducirá, finalmente, en menor cantidad de cargos para el kirchnerismo, merma de poder y  escaseo de fondos. Un panorama poco alentador. (Fuente: REALPOLITIK)

 

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