Reclamos con respuestas irrisorias

Vecinos sin agua: La ropa al lavadero y a bañarse con baldes, en pleno centro de la ciudad

Problemática de larga data.
Problemática de larga data.

Un grupo de vecinas de calle 17 entre 165 y 166 volvió a manifestar su preocupación ante la falta de agua, que afecta a un total de 18 familias que viven en la cuadra.

“La situación es crítica. Desde noviembre de 2019 no tenemos agua y sólo algunos días contamos se nos habilita la red pero con baja presión, algo que nos dificulta para llenar los tanques”, comenzó diciendo Cristina, una de las frentistas.

Por estos motivos, “no podemos higienizar nuestras casas, y ni que hablar de lo que ocurre con la pandemia, donde ni siquiera podemos higienizarnos nosotros como corresponde”.

Los reclamos y visita a la Municipalidad, se hicieron desde el primer día, y después de varios meses “vino ABSA a decir que la semana pasada iban a venir a destapar; algo que, por supuesto, no ocurrió”.

Bajo esta misma idea, Mirta comentó: “cuando llamé al 0800 de ABSA me sugirieron que concurra a las oficinas de Berisso donde tomaron el reclamo. Esto fue en noviembre, y de allí en más no hubo respuestas”.

Particularmente con los llamados personales a la empresa prestadora del servicio Mirta señaló que la insistencia se dio en reiteradas oportunidades: “para hablar con alguna persona tenés que esperar en el teléfono media hora. Las empleadas que reciben la llamada te tratan mal. Dicen que ellas sólo están para recibir el reclamo; sin embargo, un día una de ellas me contestó que lo que sucedía era por culpa de Juan Domingo Perón, algo muy irrisorio por cierto”.

“Durante gran parte del día no tengo ni una gota de agua. En el baño, al no poder subir a los tanques, nunca tenemos agua; por ello debo mandar la ropa al lavadero y juntar agua en baldes para poder bañarnos”, describió.

Hoy día, en el marco de la pandemia, “no es posible vivir de este modo; y mientras tanto mensualmente pago un servicio que no tengo. Soy una persona mayor, jubilada, y no estoy en condiciones para vivir de esta manera”.

Debido al tiempo transcurrido, los reclamos ya manifiestos y el pago del servicio, los vecinos “esperamos que alguien tome cartas en el asunto y dejen de prometer, porque si quieren tener un cargo, deben cumplir. Y si no pueden que dejen el lugar a otro, alguien que sí tenga intensiones de hacer que Berisso esté como se merece”.

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