La comuna lleva gastados cerca de 10 millones de pesos del Fondo de Infraestructura Municipal y otro dinero no detallado en la repavimentación y bacheo de las arterias más transitadas. De todos modos, las obras a medios terminar dejan a la vista la mediocridad de la empresa que se encargó de las tareas.

Se puede observar transitando la calle 17 la desprolijidad de la firma en cuestión, desde la calle 153 a Avenida Montevideo, por la pobreza del material usado y los nuevos baches sobre ese pavimento, así como también grietas generadas por el trabajo con martillo neumático sobre los sectores que, aparentemente, dejaron abandonados.

Algunos ejemplos se pueden ver en la reparación sobre entre 161 y 162, frente el Jardín de Infantes 910, que ya luce un nuevo bache sobre el material utilizado o el agrietado en el cruce de la calle 165 y 17, donde se deja ver la rotura de la calzada por las perforaciones del trabajo con la maquinaria neumática.