La reconocida bollería ubicada en calle 9 y avenida Montevideo celebró su quinto aniversario en la ciudad. En una reciente entrevista con Berisso Ciudad, el reconocido pastelero Juan Manuel Herrera, quien ha participado en distintos programas de la televisión argentina, habló sobre su carrera y su decisión de seguir apostando por la ciudad que lo vio crecer.
Desde su infancia, Herrera estuvo rodeado de harina y masa, siendo hijo del dueño de la panadería La Primavera. Sin embargo, en sus primeros años, no veía la pastelería como una vocación. "Yo era el típico vago", confesó con humor. Tras terminar la secundaria, decidió estudiar gastronomía, inicialmente como una forma de mantenerse ocupado y evitar el enojo de su padre. Fue en ese proceso cuando descubrió su verdadera pasión.
Su talento se hizo evidente desde el inicio. "Mientras otros luchaban por enrollar una medialuna, a mí me salía solo", recordó. Esa facilidad y amor por el oficio lo llevaron a buscar experiencias fuera del país. Luego de un viaje a España, decidió enviar su currículum al canal de cocina Utilísima, no con la intención de hacerse famoso, sino para construir su propio camino. Acompañado por Osvaldo Gross, su carrera en los medios comenzó a despegar.
La apertura de su bollería marcó un punto de inflexión en su vida. Eligió estratégicamente un local en Berisso, en una zona con gran concurrencia, convencido de que quería quedarse en su ciudad. "Siempre quise quedarme en Berisso, nunca me quise ir", afirmó. Según comentó, su negocio se distingue por la diversidad de productos, aunque admitió que las medialunas tienen un éxito indiscutido. "Si vendiera solo medialunas, me iría muy bien", aunque su apuesta es ofrecer una amplia variedad para satisfacer a todos los clientes.
Para Herrera, su panadería se destaca porque hace lo que realmente le apasiona. Ser una figura conocida, admite, tiene sus pros y contras, ya que muchas veces recibe tanto admiración como críticas. "Siempre hay quienes vienen solo a criticar lo que uno hace", señaló.
En sus redes sociales, donde suma más de trescientos mil seguidores, comparte algunas de sus recetas con gran éxito. Además, desde hace varios años, dicta sus propias clases de pastelería.
De cara al futuro, el pastelero tiene claro su objetivo: la excelencia. "Busco que cada producto sea excelente". Aunque no planea expandirse con más locales, sí contempla diversificar su oferta e incorporar una sección de comidas saladas, similar a una rotisería.
