Los residentes de la intersección de 72 y 127, en el barrio Villa Progreso, expresaron su indignación ante la falta de soluciones para las recurrentes inundaciones que sufren cada vez que llueve. Según denuncian, incluso con precipitaciones leves, las calles se anegan rápidamente, afectando las viviendas y generando una situación insostenible.

Uno de los vecinos afectados comentó: "Cada vez que llueven dos gotas, la calle se llena de agua. Los autos pasan a gran velocidad y el agua entra directamente a nuestras casas. Es desesperante".

Además, los frentistas aseguran que, ante la inacción de las autoridades, ellos mismos intentan paliar la situación limpiando las zanjas y retirando barro y residuos. Sin embargo, estas tareas no son suficientes para evitar las inundaciones. "Yo trato de sacar la mugre que dejan los vecinos en las zanjas, pero igual nos seguimos inundando. Es una lucha constante", explicó otro habitante de la zona.

Los vecinos exigen al municipio que intervenga con obras de drenaje y saneamiento para evitar que la acumulación de agua continúe perjudicando su calidad de vida. Asimismo, solicitan campañas de concientización para evitar que los desechos obstruyan las vías de escurrimiento.

Hasta el momento, no han recibido respuestas concretas por parte de las autoridades locales. En tanto, el barrio sigue padeciendo las consecuencias de un problema que, según los habitantes, "podría resolverse con voluntad política y planificación adecuada".