Una semana donde se aprueba la Ley Bases que solicitó el Gobierno nacional, donde sectores de clase baja y media no son los beneficiarios. Bien lo dice el ministro de Economía, una ley para ellos, los empresarios, que les da la posibilidad -entre otra cosas- de no ser multados si tienen trabajadores en negro.

También lo previsional. Sacar la posibilidad de moratorias de años de aportes que permitía, mayoritariamente a la mujer jubilarse, ya que por estadística de diez mujeres que se jubilaban, nueve lo lograban a través de esa ley. Esas mujeres mantuvieron trabajo en negro o eran amas de casa. Serán los gremios que se manifestaron el 1 de mayo los que puedan revertir esta ley aprobada en Diputados. Será el paro general del 9 de mayo un antes y un después …

Y mientras tanto, en nuestra ciudad suceden cosas que el vecino, más allá de lo económico, sufre. El aumento de servicios, aumento de alimentos, de insumos etcétera.

A los tiros, pero “estamos bien”

Es común pensar que en Berisso, frente al Conurbano, estamos en el paraíso. Ahora bien, estamos cayendo en consuelo de zonzos. Día a día en nuestra ciudad damos cuenta de episodios poco felices, que nos demuestran el grado de vulnerabilidad que atravesamos como vecinos.

Esta semana fue un tiroteo, sí, un tiroteo por parte de delincuentes qué previamente robaron una carnicería.

Lejos está el Berisso de las veredas llenas de vecinos, de los adolescentes caminando por las calles con calma, lejos está el hablar por celular mientras caminás. Hoy esto se cambió por las rejas en esas ventanas, las miradas desconfiadas, los negocios que se cierran con llave y atienden por ventanilla por miedo.

Dicen que hay plan de seguridad, que nos ponen como ejemplo, pero vayan a preguntar a los ciudadanos cómo viven.

Mientras, hay funcionarios que deben velar por nosotros que con choferes usan vehículos oficiales para quehaceres personales, personas que cobran sus buenos millones por jugar a los policías, pero hoy delincuentes tirotean a policías en plena calle.

Para el Gobierno nacional toda señal de protesta es con actores, acá no hay actores hay vecinos e instituciones que sufren la inseguridad. Pero el jefe de la policía cuida su boliche, y no es una forma de decir, es bien literal…

El Cine Victoria con más dudas que certezas

Sigue levantando polvareda el tema del Cine Municipal Teatro Victoria, que pasó a posesión de la Municipalidad allá por el 2018 en la gestión de cambiemos y fue fuertemente politizado.

Hoy el espacio dejó de tener peso cultural, hay una iglesia evangélica que alquila dos veces por semana; dicen que pagan, pero el rumor de pasillo es que no.

¿Qué pasa con las actividades culturales? ¿Qué pasa con el recurso humano? ¿Dónde están las actividades que allí se contenían? El intendente asegura que todo está contenido, pero, ¿dónde? ¿Cómo?

¿Qué pasa o va a pasar con ese espacio? Si bien es privado, significa mucho para las y los berissenses, es identidad y es oportunidad. ¿Por qué se llegó a esta instancia? Más dudas que certezas. Pero sepan que la cultura no es gasto, es inversión.

Qué habrá de cierto en que quienes tenían la responsabilidad de administrarlo, no habría rendido los ingresos de obras de teatros que debía una parte usarla para el manteniento del lugar; o de las fiestas a altas horas de la noche. Cuando el río suena, agua lleva...

Ni artistas ni influencere, concejales

No les entra bala y convencidos y convencidas de que es el camino, desde el Concejo Deliberante siguen apuntando a la pérdida de los medios de comunicación.

Tal cual lo hace Javier Milei, ellos y ellas deciden comunicar todo por redes, fotos, videos con los dedos en V, contenido armado y desarrollado, olvidándose además que no son artistas. Chicos y chicas, son funcionarios y funcionarias. Les paga el pueblo y hay pautas de comunicación institucional que no respetan. Por ejemplo nos enteramos de reuniones de comisión (sobre cuestiones de interés público e institucional) por stories en redes

Es divertido el video en redes, pero no son ni artistas ni influencers, son representantes del pueblo, cobran de ellos. Parece que varios se confundieron de carrera, chiques.

Ojalá con los 2 millones que cobran asistieran a comedores o copa de leche y no sólo sea la foto con los dedos en V….

Reclamos y la oreja que la rompió

Desde Los Talas a La Franja, el reclamo de los vecinos y vecinas se hace sentir. En muchos casos el justificado reproche recae sobre los delegados de ambas zonas.

Calles detonadas, agua estancada, obras inconclusas, entre otras dificultades son las que los habitantes ponen en agenda.

Días atrás apareció una oreja gigante en un banner que oficiaba de “escucha”.

La gente se acercaba y dejaba en un audio su pedido para las autoridades.

Desconocemos quiénes y cómo llevan adelante esto, pero sí dejó al descubierto la necesidad de ser escuchados.